Muy relajados. Desayunando en un bar de carretera de la Nacional V, a unos 100 kilómetros de Madrid, en dirección a Extremadura, sobre las 7.30 de la mañana. Así hemos visto a Albert Rivera y Malú en unas imágenes difundidas esta tarde por el programa Sálvame. Es la primera vez que hay noticia de quien fuera el líder de Ciudadanos y su novia tras su dimisión, según recoge el autor original de este artículo informalia y comparte Manuel Trujillo para Periodista Digital.
En la secuencia vemos a la cantante en primer plano y detrás al político. Ambos piden un desayuno para llevar con café, zumo y tostadas.
Según un testigo, fue en un bar fuera de Madrid, en concreto, en la A-5 en dirección a Extremadura, y era muy temprano: las 07.30 a.m. Vio a Rivera «relajado» y «tranquilo» mientras que Malú tenía una actitud más esquiva: «A ella se le notaba un poco más oculta, como tapándose». Eso sí, nos ha transmitido que la actitud de ambos era «buena» y «positiva»
Estas escenas ponen de manifiesto que tras la debacle electoral y la dimisión, el ex presidente de Cs ha retomado su vida familiar con su pareja. Son imágenes llamativas por el momento en el que se produce, justo a primera hora de la mañana siguiente de decir adiós a la política tras la derrota de su partido en la elecciones y junto a Malú, yéndose al sur de España.
Vemos que Albert con una bolsa de patatas, pregunta cuánto es. Dice: «Una bolsita pequeña». En el programa que ha emitido las imágenes el testigo cuenta que ha coincidido con Albert y Malú en un restaurante de carretera: «Hemos estado desayunando con ellos. Era a la salida de Madrid. Yo creo que ellos estaban saliendo de viaje. Estábamos en el kilómetro ciento y pico de la nacional V, dirección Extremadura. Irán para el sur», relata. «Han desayunado, pan con tomate, café con leche, zumo de naranja, eso Malú. Y Albert Rivera, pan tostado también, con café con leche. Él, muy relajado y muy tranquilo. A ella se le notaba un poquito más oculta, más escondida, con la bufanda y no iba pintada. Él iba normal, la gente sabía que era él. Ella es la que costaba más trabajo diferenciar. Ella se ha girado pocas veces, vamos que se nota que va tapándose, un poco tapada. El que se ha movido más es Albert Rivera. Ella hablaba muy poco, el que más hablaba era Albert, iba de un lado a otro de la barra y le enseñaba cosas, y alguna vez le ponía la mano y le cogía por detrás. La actitud entre los dos era buena, era positiva. Ha sido muy pronto, muy pronto Las siete y media de la mañana y estábamos ya a una hora y media de Madrid. Estábamos circulando cuatro coches y en el bar había los dos camareros, dos camioneros y nosotros», relataba el testigo.
Albert Rivera cumple este viernes 40 años y desde Ciudadanos nos dicen que se ha ido de la política «con una mano delante y otra detrás». El Lexus que usaba pertenece al partido, en renting, y él tiene un Golf con casi diez años. Está pagando dos hipotecas (por la mitad de dos viviendas) que suman una deuda de 150.000 euros. La buena noticia es que «Malú ya está levantando teléfonos», nos aseguran.
Albert tiene una hija de 9 años; cuenta con escasa experiencia en el ámbito privado y está acostumbrado a disfrutar de unos ingresos de casi 5.000 euros al mes entre su sueldo, el complemento específico y la aportación que le daba el partido por su cargo, unos 115.000 euros anuales entre unos conceptos y otros.
Albert cuenta con una aliada incondicional: Malú. «Ella va a ayudarle y mucho», aseguran desde el entorno del ex político. «En el ámbito profesional que rodea a la cantante hay mucho dinero y Albert tiene probadas virtudes para introducirse en ese mundo y triunfar», indican las mismas fuentes, que ponen como ejemplo el perfil de Narcís Rebollo, novio de Eugenia Martínez de Irujo y presidente de Universal Music para España y Portugal. «No se trata de enchufar a Albert, todo lo contrario: se trata de capitalizar su inmensa capacidad, don de gentes, creatividad, capacidad de trabajo, buena imagen y, por qué no decirlo, proyección mediática», explican. «Y eso se paga muy bien en el mundo artístico de élite». No es solo que Malú sea su novia: Rivera es amigo de personajes y artistas tan conocidos como Alejandro Sanz. «Malú ya está levantando teléfonos», afirman desde el entorno profesional de la cantante. Pero es que la situación no es para dormirse en los laureles.
«Está acostumbrado a un tren de vida muy alto». nos recuerdan. «Vive en una lujosa zona de Madrid, va a restaurante caros y se mueve con ‘gente guapa», nos dicen. Su novia salió este lunes a la palestra cuando Albert agradeció su apoyo al despedirse. Pero Malú no ha dado la cara en público ni durante la campaña ni tras la debacle. «Albert no quiere ni pensar en ser en un mantenido de Malú», nos insisten. «De hambre no se va a morir», comentan, pero «no le vemos dirigiendo una empresa del IBEX, más bien en el mundo artístico», repiten, «o incluso en el deportivo, como o agente», sugieren.
De momento, y aunque no vaya a firmar su acta como diputado electo en la próxima legislatura, recibe un sueldo porque pertenece a la Diputación Permanente, el órgano que sustituye al Pleno hasta la constitución de la nueva Cámara. Rivera, como los otros 68 diputados que forman parte de la Diputación, cobra 2.900 euros de asignación, además de algún complemento.
«Hoy ha sido un día difícil pero también muy bonito y cargado de emociones. He recibido miles de mensajes de apoyo y respeto por mi decisión de abandonar la política y abrir una nueva etapa en mi vida», decía Albert Rivera en la que probablemente sea una de sus últimas publicaciones como hombre público. Pero esa nueva etapa en su vida a la que se refiere se llama ‘trabajar’, es decir, ganar un sueldo para cubrir las necesidades económicas. Hasta ahora, lo ha hecho en el sector público, como funcionario, salvo una corta etapa en La Caixa, en un puesto sin especial relevancia.
«Gracias a todos por vuestro cariño, me llevo vuestras palabras de afecto y los instantes que habéis publicado conmigo, en el corazón. Hasta pronto, hasta siempre. Poco antes: He servido a España durante años y ha sido lo más apasionante que he hecho en mi vida. Es la hora de dedicarme más a los míos: a mi hija, a mi pareja, a mis padres, a mis amigos. La política ha sido importante para mí, pero hay vida y felicidad ahí fuera», dice en su penúltima publicación. Tiene razón: pero la felicidad no alimenta por si sola.
El novio de Malú posee un patrimonio modesto. La declaración de bienes y rentas del Congreso de los Diputados, actualizada el pasado mes de mayo, dice que Rivera solo cuenta con 4.500 euros ahorrados en una cuenta corriente. Hasta que se fue a vivir con Malú, Albert Rivera residía en un piso alquilado en la zona de Húmera. Después, ya juntos, se fueron a La Finca, como adelantamos en primicia desde Informalia, la que pertenece a las hermanas García-Cereceda. Luego se publicó que Malú y Rivera se iban a vivir a la propiedad que la sobrina de Paco de Lucía había comprado en 2018, en La Florida, la urbanización del noroeste de Madrid donde reside por ejemplo Jorge Javier Vázquez. Sin embargo, nos aseguran que llevan meses residiendo, casi en secreto, en un lujoso chalet de La Moraleja, tal vez alquilado, mientras finalizan las obras de la casa de La Florida.
Sobre los planes de futuro laboral de Albert Rivera, en Ciudadanos nos dicen que Malú y el ámbito artístico es el camino que ven más lógico para el ex presidente. Pero no tienen «ni idea de cuándo ni de cómo se incorporará al mundo laboral». Recuerdan que su formación es la de licenciado en Derecho, que cuenta con «buenas relaciones y buena agenda», que «le deben favores», y que tiene «alma de empresario y emprendedor».
Bromas y memes aparte, nadie descarta que colabore con medios de comunicación, aunque «no inmediatamente», que escriba un libro o incluso que fiche por algún despacho de abogados.
Rivera es único hijo. Su padre es Agustín Rivera, miembro de una familia obrera de La Barceloneta. Su madre, María Jesús Díaz, es malagueña. Emigró con 13 años desde el pequeño pueblo de Cútar siguiendo a su hermano mayor, que logró abrirse camino en Cataluña sacando adelante una tienda de electrodomésticos. Su abuelo materno, Lucas Díaz, había emigrado en los años 60 a Francia y luego a Suiza. El matrimonio Rivera Díaz montó un negocio en La Ametlla, en el Vallés Oriental, y mandaron a su hijo a estudiar a la Escola Cervetó, un colegio privado de Granollers. Allí Albert practicó la natación de competición durante ocho años, llegando a ser dos veces campeón de Cataluña en estilo braza, la primera vez con 16 años. Allí conoció también a la que sería su pareja y madre de su hija, una relación que rompió en 2013. Después salió con Beatriz Tajuelo.
Albert Rivera estudió Derecho en ESADE (Universidad Ramon Llull). Allí, además de jugar al waterpolo, comenzó a interesarse por la política con profesores como el peruano José Carlos Remotti y participó en una liga de equipos universitarios de debate por toda España. Su equipo resultó vencedor en 2000, hace ahora 20 años. Entre sus profesores, tuvo también a Francesc de Carreras, catedrático de Derecho Constitucional e impulsor de la plataforma cívica Ciudadanos de Cataluña que dio origen a Ciudadanos. Pasó una temporada en Finlandia, de Erasmus: estudió durante 2001 en la Universidad de Helsinki.
Una vez licenciado, en septiembre de 2002 comenzó a trabajar La Caixa, además de cursar estudios de doctorado en Derecho Constitucional, Autonómico y Derecho Mercantil en la Universidad Autónoma de Barcelona que abandonaría sin doctorarse ni presentar tesis. Tal vez ahora tenga tiempo de hacerse doctor.
