Tamara Falcó es una mujer única. Nadie daba un duro por ella, pero la hija de Isabel Preysler se ha convertido en la reina de los fogones, en la merecidísima cuarta ganadora de ‘MasterChef Celebrity’ según quemedices. “Soy tan feliz, quiero seguir cocinando todo el tiempo. Estoy muy agradecida al programa”, reconoció emocionada después de batirse con el actor sevillano Félix Gómez.
Capaz de hablar de bragas del mercadillo con Yolanda Ramos, de intimar con Los Chunguitos o de besar en directo a Jordi Cruz, todo ello con la misma naturalidad con la que en realidad lleva dirigiendo su vida desde siempre.
Es el nombre de la semana y Tamara Falcó lo sabe: su victoria en MasterChef ha puesto por las nubes a esta encantadora mujer, hija de la mítica Isabel Preysler y del Marqués de Griñón, y toda España ha descubierto que, bajo esa apariencia de niña bien caprichosa, se esconde una dama inteligente, simpática, muy espontánea y divertida.
Y claro, aprovecha el momento, y de qué manera, proyectando su propia imagen con la idea de promocionar su marca de moda. Y lo ha hecho con una imagen que, simplemente, lo está «petando» con miles de «Me gusta» y que los lectores de ESchismógrafo pueden ver al final de este artículo, según recoge esdiario y comparte Francisco Lorenson para Periodista Digital.
No es para menos: sensualidad, elegancia y ese punto de picardía que tanto sabe explotar una mujer cercana ya a los 40 que presume de tipazo ahora con la misma espontaneidad con que defendía sus volúmenes cuando, en el pasado, tenía sobrepeso y defendía su aspecto sin problema alguno.
Es Tamara Falcó, y de cómo es da cuenta su hermana Xandra, en unas declaraciones de este fin de semana que lo dicen todo de la ganadora de MasterChef Celebrity: » Es que Tamara tiene un lado muy humano, que creo que se ha visto, desollando los conejos que es el lado del campo. Nosotros tenemos una tradición en el mundo del campo y es estar cercano a la tierra y cuando eres cercano a la tierra, lo eres a las personas».