Corren malos tiempos para Julián Contreras. La crisis del coronavirus ha golpeado duramente al hermano de Francisco y Cayetano Rivera Ordóñez, en el aspecto económico, hasta el punto de verse en la necesidad de solicitar el auxilio del Gobierno. Pese a que es plenamente consciente de que «hay personas que seguramente lo estén pasando peor» que él, ha confesado el drama que está viviendo. Lo ha hecho en la revista Semana, donde ha asegurado que, a causa de la pandemia, el bingo donde trabaja como relaciones públicas (Bingo Copacabana) ha realizado un ERTE.
«Yo tengo una nómina y me he visto recortado como cualquier otro«, ha admitido, al tiempo que ha reconocido su disconformidad con la suspensión «de manera tajante» de determinados asuntos y labores.
Julián está pasando el confinamiento junto a su padre y está «aprovechando para escribir porque no tengo actividad de ningún tipo». Recomienda a los lectores disfrutar de uno mismo, «parar, aprender» y echar mano de «la calma y la tranquilidad» para sobrellevar esta coyuntura sin precedentes, ya que «la ansiedad por que termine ya te somete a mucho estrés y va a ser luego una locura».
«Es mejor no pensar ni en mañana ni en fechas ni en nada», ha apuntado.
En lo referente al vínculo con sus hermanos, ha agradecido el interés de la publicación, pero ha preferido no pronunciarse al respecto y, en cuanto al amor, considera que «no es el mejor momento para las parejas».
«Prefiero seguir soltero pre y post coronavirus porque es como estoy bien. Hay personas que están mejor en pareja, pero ese no es mi caso. A estas alturas que ya no soy un niño tengo claro que yo estoy bien solo», concluye.
