En la ópera y del brazo de Tamara Falcó. Así reapareció en público ‘la reina de corazones’ unas horas antes de celebrar su 72 cumpleaños. Isabel Presyler vive desde los últimos días de 2022 inmersa en una vorágine mediática a raíz de su separación del escritor Mario Vargas Llosa.
La guerra de filtraciones entre el premio Nobel y la socialité amenazaba con recrudecerse, pero Isabel ha dedido poner punto y final a un enfrentamiento del que podía no salir muy beneficiada. Para la filipina ésta ha sido la única ocasión en la que no ha tenido el control absoluto de lo que se dice de ella en los medios. Vargas Llosa rompió con su modus operandi desde que, en 1978, se divorciara de Julio Iglesias.
Isabel, sin embargo, ha dedido dejar las cosas en tablas. Hace unos días declaraba en El Mundo, “lo único que quiero es que esta guerra se acabe». “Lo único que quiero es estar tranquila y disfrutar de mis nietos», añadía.
Tamara respondió a Vargas Llosa
Unas horas antes la marquesa de Griñón había hecho lo propio en un envento del mundo de la moda en la Mercedes-Benz Fashion Week junto a Iñigo Onieva. El prometido de Falcó pasó como exhalación ante los medios, pero Tamara cumplió y entró al trapo de la guerra que su madre ahora quiere olvidar.

Tamara Falcó e Iñigo Onieva.
La televisiva respondió al hecho de que el exnovio de su madre la dedicara críticas veladas en un párrafo de su polémico cuento Los vientos. «En esta última, la Filosofía comparte el departamento académico con Teología y Cocina. ¡Vaya mezcla! Me imagino el diploma de Doctor en Filosofía, Teología y Gastronomía y me muero de risa», se podía leer en el relato del premio Nobel.
Tamara prefirió tomarse con humor la referencia del que fuera pareja de su madre: «Me encanta que un premio Nobel escriba de mí».
Lo cierto, es que en el momento en que el autor de La ciudad y los perros escribió ese texto, la relación entre el peruano y la marquesa de Griñón parecía ser buena e incluso el escritor se prestó a aparecer en los realities en los que la aristócrata ha participado como La marquesa en Netflix o en MasterChef en Televisión Española.
Ahora, Isabel Preysler quier olvidarse de una guerra mediática que no la ha beneficiado y centrarse en su familia, que vivirá en los próximos meses un gran evento con el enlace entre Tamara e Iñigo.