(PD/Agencia EFE).- El concejal responsable de la materia cree que el objetivo era ‘llevarse el cobre’. El agua de los grifos sólo podrá usarse por ahora para la ducha o la limpieza.
Alrededor de 25.000 vecinos de Montserrat se han quedado sin agua potable debido al sabotaje del aparato eléctrico de los pozos de Aquagest, responsable del servicio, según informó el concejal de Servicio de Agua, Joan Gacía Perales.
El suceso se produjo sobre las 04.00 horas de este domingo en la zona donde se encuentra el citado aparato eléctrico, de donde se llevaron cable de cobre. «Lo han dejado todo sin funcionar», explicó el edil.
Como consecuencia de este sabotaje, los vecinos de la localidad, así como los de Real, Montroy y las urbanizaciones de los alrededores, no podrán volver a tener agua potable al menos hasta el lunes o el martes, una vez esté solucionado el problema.
El concejal indicó que los vecinos afectados ya han sido alertados de que no utilicen el agua de los grifos para beber ni cocinar, sino sólo para la ducha o la limpieza. Aunque no habrá un corte total del agua, los vecinos sí notarán que el agua de los grifos sale con menor presión.
Cinco operarios de Aquagest están intentado solucionar el problema mediante un grupo electrógeno de 500 voltios. Mientras tanto están llenando los depósitos con agua no potable procedente de otros pozos.
A juicio del concejal, el acto no ha sido «vandalismo», sino que fue realizado por «alguien que conocía el tema y cómo quitar la red de alta tensión». «El objetivo era llevarse el cobre», añadió.
