(PD / EFE).- El hombre y dos cuñados de la joven paquistaní la asesinaron porque no respetaba las normas de su cultura y rechazó casarse con la persona que le había elegido el padre. Luego la enterraron en el jardín.
Un tribunal de la ciudad italiana de Brescia ha condenado a 30 años de prisión al padre y dos cuñados de una joven paquistaní a la que mataron por considerar que sus costumbres eran demasiado occidentales.
Un tío de la muchacha fue condenado a dos años y ocho meses de prisión por haber ayudado a enterrar el cadáver en el jardín. Hina Saleem, de 21 años, fue degollada por su padre en la casa familiar tras una discusión el pasado mes de agosto.
El Fiscal Giancarlo Tarquini señaló tras la detención de los culpables, días después de los hechos, que la joven fue asesinada porque no respetaba las normas de su cultura, tenía un novio italiano y rechazó casarse con la persona que le había elegido el padre.
El asesinato de la joven, que trabajaba en una pizzería y convivía desde hacia unos meses con su novio italiano de 33 años, causó estupor en Italia.