Es una universitaria de 23 años que sale con un hombre casado. Quería que éste que dejara de atender a su mujer y pensó que la mejor manera era acudir al juzgado a poner una denuncia falsa por una brutal violación que no sufrió a manos de tres individuos.
La joven no calculó bien las consecuencias que iba a acarrearle inventarse una violación y tendrá que responder ante los tribunales por inventarse un hecho tan grave y describir a tres individuos que no la habían violado con una brutalidad extrema. Dio detalles, tan aparentemente coherentes como salvajes, sobre la violación que había sufrido al salir de su facultad.
Dijo que la introdujeron por la fuerza en una furgoneta, la llevaron a un descampado de la carretera de Valencia y, amordazada de pies y manos, la sometieron a todo tipo de abusos sexuales y la liberaron, pero dijo que había lavado la ropa interior, cosa que nunca debe hacerse cuando se sufre una agresión sexual.
Le mostraron fotos de personas fichadas por abusos sexuales y la descarada señaló a uno de los fotografiados, aunque matizó que no estaba segura del todo.
Contó que el día de los hechos prefirió no decir nada a sus familiares para no preocuparles, pero que se sentía angustiada y que al día siguiente, mediados de diciembre pasado, tuvo que ir de urgencia a un hospital de Madrid con una crisis de ansiedad. Y que fue en el hospital cuando relató lo ocurrido a su familia y a su novio, por separado, para explicarles el motivo de su crisis de ansiedad.
Los agentes realizaron pesquisas, aunque entre ellos, a medida que cruzaban datos, crecía la sensación de que algo no cuadraba. Y es que en las dos declaraciones que prestó la joven, en días alternos, había contradicciones sobre la hora de los hechos y el lugar donde éstos se habían producido.
Era mentira
«Todo es falso», admitió la chica a la policía. «¿Y por qué lo has hecho?», le preguntaron los agentes. «Yo no quería denunciar nada, lo hice forzada por mi familia, pues decían que lo que me había ocurrido era muy grave. Yo en realidad les conté lo de la violación para llamar de alguna forma la atención de mi novio, que está casado; y quiero que esté más pendiente de mí… Le necesito más de lo que pueda necesitarle a él su esposa”, comentó la chica ante el estupor de los agentes.
La Fiscalía de Madrid le ha abierto diligencias por denuncia falsa, según recoge El País.
