(PD / Agencias).- Ocho niños discapacitados murieron este miércoles por inhalación de humo en un centro de acogida de la provincia sureña de Cantón tras incendiarse una manta con un incienso para repeler los mosquitos.
Los menores fallecidos, de edades comprendidas entre los cuatro y los nueve años, estaban durmiendo en cuatro camas instaladas en una habitación de 18 metros cuadrados en el primer piso de la Casa de Acogida Municipal de la ciudad de Huizhou.
El fuego afectó tan sólo a la manta, que se había deslizado de una de las camas, pero al estar cerradas todas las ventanas del cuarto el humo no pudo salir y causó la muerte de los niños, explicó un funcionario del centro de protección de menores.
Los niños, algunos con discapacidades físicas y otros mentales, fueron hallados muertos a las 03.44 de la madrugada de hoy (19.44 GMT del martes) por un grupo de empleados que efectuaban una ronda nocturna.
El centro, fundado en 1994, acoge a 60 niños discapacitados y huérfanos, así como a 80 viudas ancianas y soldados jubilados. Las autoridades han puesto en marcha una investigación para depurar responsabilidades en el accidente, añadió el funcionario.
