(PD).- Un centenar de personas ha fallecido hoy al estallar una tubería de distribución de combustibles a las afueras de la ciudad nigeriana de Lagos, según informan fuentes de la Cruz Roja.
El accidente se ha registrado en el barrio periférico de Ijegun cuando una excavadora que trabajaba en la ampliación de una carretera ha golpeado la tubería y ha provocado una explosión y el incendio posterior.
Los heridos llegan a la veintena, algunos de ellos en estado grave, según el coordinador de la Cruz Roja, Suleman Maikubi. Además, fuentes de los equipos de rescate han señalado que el incendio ha afectado a unas 15 viviendas que había en ´la zona.
Se teme que entre los fallecidos haya alumnos de una escuela próxima al lugar de la explosión, aunque los equipos de rescate han afirmado inicialmente que habían conseguido poner a salvo a los menores.
Demasiados accidentes de este tipo
Abdullahi Mohamed, de la Agencia Nacional de Emergencias, ha explicado que se teme que el incendio no pueda quedar controlado hasta mañana, viernes, porque esta tarde todavía no se había logrado detener el flujo del combustible.
El accidente de hoy es el último de una serie de explosiones e incendios registrados en conductos de combustibles de Nigeria que ha dejado centenares de muertos. Sin embargo, los anteriores habían sido provocados por personas que destruían secciones de los conductos para robar el combustible.
El último accidente de este tipo se registró el 25 de diciembre de 2007, en la localidad de Ikate, a las afueras de Lagos, y en él perecieron 42 personas. En 2006, en dos accidentes parecidos, unas 350 personas fallecieron en el área de Abule Egba, a las afueras de Lagos, y en el puerto de Atlas Cove, al suroeste de esta ciudad.
El peor accidente se registró en 1998, cuando unas mil personas fallecieron al producirse una explosión en un conducto de combustibles de la localidad de Jesse, en el área del delta del río Níger.
