(PD).- La Guardia Urbana de Lérida pudo detener a un ladrón que robó una cámara de fotos de un establecimiento de la ciudad después de que llevara a arreglar el aparato a la misma tienda donde lo había robado.
Según informó ayer la policía local, la detención se produjo el jueves, a las 11.35 horas, tras recibir el aviso de un establecimiento de la calle Major de que un individuo había llevado una cámara de fotos que había sido robada de la tienda con anterioridad para que le pusieran una tarjeta de memoria y una batería.
Cuando una de las dependientas reconoció la cámara como una de las sustraídas unos días antes, el individuo huyó corriendo del local en dirección al casco antiguo de Lérida.
Arresto del ladrón
Después de que las autoridades recibieran el aviso, una de las patrullas de la policía se puso a buscar al ladrón hasta que lo localizaron en la calle del Canyeret.
El detenido, que responde a las siglas Y.D., de 33 años, nacido en Senegal y vecino de Lérida, llevaba colgada al cuello una cámara fotográfica y, dentro de una mochila, una cámara de vídeo y dos teléfonos móviles.
Tras comprobar que la cámara fotográfica que había dejado en el establecimiento era una de las sustraídas el pasado día 1 de septiembre, y que Y.D. era el mismo individuo que la había llevado a reparar, los agentes le detuvieron y le trasladaron a la comisaría de la ciudad.
