(PD).-Una médico del Servicio de Ginecología del Hospital General de Igualada (Barcelona) sufrió una agresión el pasado sábado tras comunicar una muerte fetal a una paciente, según informó hoy el sindicato Médicos de Catalunya, que expresó su «preocupación» por estos incidentes «cada vez más frecuentes» en los centros sanitarios.
Los hechos ocurrieron sobre las 13 horas cuando una paciente embarazada se presentó en el Servicio de Ginecología del hospital para hacerse unas pruebas de bienestar fetal que revelaron la muerte del feto.
Cuando la ginecóloga de guardia comunicó la noticia a la paciente, ésta solicitó el derecho a obtener una segunda opinión del equipo médico del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona y exigió el traslado en ambulancia hasta este centro.
El hospital denegó la ambulancia al considerar que no requería el traslado urgente medicalizado hasta Barcelona. Esta negativa provocó la reacción violenta de los familiares que le acompañaban, que comenzaron a insultar, amenazar y zarandear a la médico y a dos trabajadores más del centro.
Los Mossos d’Esquadra se desplazaron al hospital y los trabajadores de la ambulancia presentaron una denuncia posteriormente en comisaría contra los agresores por una falta de lesiones y otra de amenazas, de las que hoy se celebró un juicio rápido, según informaron a Europa Press fuentes de la Policía catalana. La mujer sufrió lesiones mínimas.
