(PD).- Cuatro niños han fallecido y al menos otras 16 personas han resultado heridas, dos de ellas de caracter grave, tras hundirse el tejado y parte de una pared de una instalación deportiva de Sant Boi de Llobregat.
Once chavales, jugadores del club de béisbol de la localidad, practicaban el bateo en una sala anexa a su estadio, ya que el temporal impedía jugar con normalidad en las pistas exteriores. A las 11.15 horas, el fuerte viento, que en Sant Boi ha superado los 100 kilómetros por hora, se ha llevado por delante el techo. Al caer, dos de las cuatro paredes de la instalación han cedido, dejando sepultados a las trece personas que había dentro de la sala. Los Bomberos han tardado 45 minutos en rescatar a los heridos, aunque no han podido hacer nada por cuatro de ellos. A la zona se han trasladado 12 ambulancias y han acudido el presidente de la Generalitat, José Montilla, el consejero de Interior, Joan Saura, y la secretaria de Deportes, Anna Pruna.
El Ayuntamiento ha instalado un dispositivo en un centro cívico cercano para atender psicológicamente a los familiares de los fallecidos. Minutos después del accidente, a la zona se han desplazado amigos, conocidos y familiares de los niños, además de personas vinculadas con el club de béisbol, a interesarse por la situación de los heridos. La angustia se ha acrecentado con las horas: «Es una tragedia, nos conocíamos todos. Yo voy a ver cómo juegan estos niños y ellos se fijan en cómo lo hago yo», ha exlpicado desolado Josua Abdela, jugador del primer equipo.
El Estadio Municipal de Atletismo Constantí Miranda, donde desarrolla su actividad el Club de Béisbol y Sóftbol de Sant Boi, fue construido hace 25 años y se encontraba en perfecto estado, según el alcalde de la localidad y el presidente del equipo.
Cinco víctimas más del temporal
En las últimas horas, otras cinco personas han perdido la vida a causa del fuerte temporal que está afectando a casi toda España. La última víctima se ha producido alrededor de las dos de la tarde, cuando una mujer de unos 73 añosha sido golpeada por una puerta a causa del fuerte viento en Hontoria de Valdearados (Burgos).
En A Coruña ha fallecido uno de los seis tripulantes que han sido evacuados del buque Braga a causa del fuerte temporal en el mar, informa EFE. Los seis tripulantes fueron rescatados a 70 millas de la costa por el helicóptero Helimer Galicia y llevados al aeropuerto de Alvedro. Hasta allí se han desplazado varias ambulancias que han certificado la muerte de uno de los marineros y trasladado a los otros cinco tripulantes a uno de los hospitales de la ciudad, de donde ya han sido dados de alta.
Por otro lado, esta misma mañana un hombre ha muerto en la localidad barcelonesa de La Palma de Cervelló tras caerle un árbol derribado por el viento. La pasada madrugada, la caída de otro árbol también causó la muerte de un agente de la Guardia Civil en Lugo cuando intentaba retirar otro que había caído por el viento. Ayer, una mujer de 52 años falleció en Barcelona aplastada por un muro que no logró resistir los embates del vendaval.
La cornisa cantábrica está padeciendo los peores efectos del temporal que seguirá afectando hoy a la mayor parte de España. Protección Civil mantiene la alerta roja (riesgo extremo) en Cantabria, País Vasco, Valencia y la costa de Galicia, con rachas que en algunos puntos del litoral pueden alcanzar los 170 kilómetros por hora. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado, además, la alerta naranja (riesgo importante) en todas las comunidades autónomas, salvo Canarias.
