Momentos antes de estrellarse la avioneta, el piloto de la aeronave se comunicó con la torre de control del Aeropuerto Gateway en Kissimmee, sin ningún aparente contratiempo.
Los cuerpos de Carmen Blanco Herrera, de 45 años y sus tres hijos de 19, 18 y 17 años, se encuentran en un lago infestados de serpientes y de caimanes.
Además, los aguaceros y tormentas eléctricas registradas en el centro de Florida dificultaron el rescate de los restos.
UN CESSNA 172
En la operación de rescate participa un equipo de buceadores y especialistas de los condados de Osceola, Orange y Polk que no han podido llegar hasta donde se encuentra la Cessna 172 al ser un lugar pantanoso de difícil acceso e infestado de caimanes y serpientes.
Según informaron fuentes diplomáticas españolas hasta el momento sólo se han recuperado algunos restos humanos que todavía no han sido identificados, mientras los buceadores intentan llegar a la cabina de la avioneta.
A las inclemencias del tiempo se añaden las complicadas condiciones para el rescate de los cuerpos debido a que la avioneta se encuentra sumergida en el lago Russell, al suroeste del condado de Osceola, cerca de Orlando, una zona pantanosa y con poca visibilidad.
EL PADRE VIAJA A MIAMI
José Manuel Martínez, esposo de la fallecida y padre de los jóvenes, llegó hoy a la localidad de Ponciana acompañado de un hermano, una hermana y el cónsul General de España en Florida, Santiago Cabanas.
Martínez y sus hermanos llegaron el martes procedentes de Valladolid (centro de España), su ciudad natal, y fueron recibidos por familiares y personal diplomático español.
Martínez, sus dos hermanos y el cónsul Cabanas permanecerán en el lago Russell hasta que terminen las operaciones de rescate.
AYUDA DE PSICÓLOGOS
Las autoridades locales han dispuesto la ayuda de un psicólogo para atender a los familiares que siguen a la espera de que los buceadores rescaten a los cuerpos.
Fuentes diplomáticas españolas explicaron que la ayuda y disposición de las autoridades locales es total y que están haciendo todo lo posible por ayudar a la familia y lograr recuperar los cuerpos de los fallecidos.
Las autoridades españolas han solicitado las huellas dactilares de los fallecidos y otras informaciones para proceder en cuanto sea posible a las tareas de identificación de los cuerpos.
PILOTABA EL HIJO MAYOR
La Cessna había despegado del aeropuerto de Gateway de Kissimmee y volaba de regreso a la ciudad de Fort Lauderdale (norte de Miami), cuando, por causas todavía desconocidas, se precipitó sobre el centro del lago, indicó el Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) de Estados Unidos.
La avioneta desapareció del radar en la noche del lunes pasado, alrededor de las 22:23 hora local (3:25 GMT), poco después de despegar del aeropuerto de Kissimmee con destino a dicha ciudad, agregó la NTSB.
El joven de 19 años que pilotaba la avioneta, propiedad de la compañía Airborne Sustems Inc., que alquila regularmente los aparatos a la escuela de vuelo de Fort Lauderdale, acababa de obtener su licencia de piloto en ese centro.
Momentos antes de estrellarse la avioneta, el piloto de la aeronave se comunicó con la torre de control del Aeropuerto Gateway en Kissimmee, sin ningún aparente contratiempo.
El joven piloto ingresó en junio pasado en la escuela de aviación de Fort Lauderdale y residía en un apartamento de Pompano Beach, al norte de Miami.
(Agencias)
