El portavoz de CiU en el Congreso de los Diputados, Josep Antoni Duran i Lleida, considera que la violencia doméstica, que es una realidad social �de las más preocupantes en España� y que se está recrudeciendo en los últimos meses con más muertes, es �fruto de algo más profundo que tiene nuestra sociedad, que es una crisis de valores profunda, una crisis de la familia, un exceso de desestructuración de las familias�.
En declaraciones a Servimedia, Duran señaló que erradicar la violencia doméstica debería ser uno de los principales objetivos de la sociedad española, porque, a la luz de las últimas cifras de mujeres asesinadas, es un problema que, lejos de desaparecer, �va creciendo�.
En este sentido, criticó que �básicamente� lo que ha hecho el Ministerio de Igualdad desde que se creó se reduce a la Ley del Aborto, un trabajo que bien podría haber realizado �cualquier otro ministerio�.
Ante ello, Duran i Lleida abogó por la supresión del Ministerio de Igualdad. �Sinceramente, yo creo que el Ministerio de Igualdad no sirve para nada, lo que no significa que no se puedan hacer políticas de igualdad; ésa debe ser una política transversal que no requiere un ministerio específico�, dijo.
En su opinión, la eliminación del Ministerio de Igualdad debe formar parte de la �necesaria� reforma de la Administración Pública y de su gasto, y �cuanto antes se haga, mejor�.
Defendió también la desaparición del Ministerio de la Vivienda, �no porque no deba ocupar ni preocupar la vivienda, entre otras cosas porque el acceso a una vivienda digna es un derecho constitucional�, sino porque las competencias en este campo están transferidas a las comunidades autónomas. �Por lo tanto, no tiene sentido ese ministerio�, añadió.
Poca razón de existir tiene también para Duran i Lleida la Vicepresidencia Tercera del Gobierno, cuyas �escasas competencias� debieran ser utilizadas para impulsar una Ley de Financiación Local, �cosa que no hace�. �Si lo poco que tiene que hacer no lo hace…�, agregó.
De la estructura de la Administración Pública, Duran quitaría también el Ministerio de Cultura, pues las competencias en esta área también están transferidas a las comunidades autónomas, sin perjuicio de instituciones que se encargan de difundir la cultura en el exterior, como, por ejemplo, el Instituto Cervantes.