Los bomberos de Valladolid han sofocado este mediodía un incendio declarado en la cocina del Mesón Restaurante Los Zagales de La Abadía, sito en la calle Pasión, en el que no hubo que lamentar desgracias personales. Tan sólo el cocinero del establecimiento tuvo que ser evacuado hasta un centro hospitalario tras resultar levemente intoxicado por inhalación de humo.
El fuego se ha registrado minutos antes de las 12.45 horas, que es cuando el Parque de Bomberos ha recibido la llamada para acudir a extinguir las llamas declaradas en la campana extractora del establecimiento hostelero, que ya para entonces había procedido a la evacuación de los cerca de cuarenta empleados y media docena de clientes que en esos momentos había en el local.
Además, vecinos y trabajadores del bloque situado en el número 13, contiguo al restaurante, han desalojado el edificio por propia iniciativa como medida preventiva, ya que las llamas iniciadas en la cocina se han extendido por el conducto de evacuación de humos hasta un patio interior existente en el referido inmueble.
La extinción la ha iniciado el propio cocinero, de ahí que haya sido la única persona evacuada al resultar intoxicada, al parecer de carácter leve, por la inhalación del humo procedente del fuego y del vertido del extintor utilizado, tal y como ha explicado, en declaraciones recogidas por Europa Press, el agente de bomberos Gerardo Cabrero.
Este ha precisado que los trabajos se han centrado inicialmente en la campana extractora de la cocina, en el conducto de evacuación de humos individual, donde se originó el fuego, si bien más tarde hubo que actuar también para sofocar las llamas que salían por la parte superior del extractor de humos situada en un patio interior del edificio número 13.
«Los daños han sido importantes y afectan a todo el sistema de evacuación y extracción de la chimenea individual, ya que estamos hablando de una cocina industrial con una carga de gas bastante importante», ha añadido el funcionario de bomberos, con lo que es más que probable que el local permanezca cerrado varios días como mínimo.
En los trabajos de extinción participaron tres vehículos de los bomberos y catorce funcionarios, mientras que efectivos de la Policía Nacional y de la Policía Municipal acordaban la zona con el fin de facilitar dicha labor y para evitar posibles situaciones de riesgo para las decenas de curiosos que se congregaron en las inmediaciones.
