La Guardia Civil de San Antonio (Ibiza) ha detenido en Barcelona a un hombre de 39 años que formaba parte de una banda organizada de colombianos que se dedicaba a introducir y distribuir cocaína en Formentera, de donde huyó tras la desarticulación del grupo.
Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado, la detención se produjo en Barcelona, en el marco de la denominada operación Tristón, en la que fueron detenidas 29 personas el pasado mes de diciembre.
El detenido, al que se acusa de un delito contra la salud pública, se había establecido en Barcelona después de haber abandonado Formentera cuando el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de Ibiza desarticuló la banda. Al parecer, fue localizado en la capital catalana, donde trabajaba como cocinero en un conocido restaurante.
La Guardia Civil ha señalado que la operación no se dará completamente por cerrada hasta la localización de dos individuos más que siguen huidos de la justicia.
Por parte otra, la Guardia Civil de Artá ha detenido a dos turistas alemanes a los que se ha imputado un delito de abandono temporal de menores.
Según ha explicado el Instituto Armado, los hechos ocurrieron el pasado domingo cuando la Guardia Civil de Artá recibió el aviso de un vecino que alertó de que a unos 800 metros de las cuevas de Artá había un vehículo estacionado en el arcén de la carretera, totalmente cerrado y con un niño de corta edad en el interior, sin que hubiera ninguna persona más en los alrededores.
De inmediato, se personaron en el lugar tanto Policía Local de Capdepera como la Guardia Civil de Artá, que comprobaron los hechos. Allí encontraron un coche, que resultó ser de alquiler, en cuyo interior había una niña de corta edad sentada en el asiento trasero, llorando y sudando en abundancia. Al parecer, la menor presentaba claros síntomas de calor y tenía la piel bastante enrojecida.
Ante estos hechos, los agentes rompieron un cristal del vehículo para rescatar a la menor y atenderla ante los evidentes síntomas de deshidratación hasta la llegada de los servicios médicos que se desplazaron al lugar. No obstante, los sanitarios determinaron que no era necesaria su intervención ya que la niña había ingerido agua y se encontraba en perfecto estado.
Una vez rescatada y asistida la menor, se realizaron las gestiones pertinentes para la localización de los padres, quienes resultaron ser una pareja de turistas de nacionalidad alemana que se había desplazado al lugar para visitar las cuevas de Artá, y estaban allí «tranquilamente». La Guardia Civil ha afirmado que la vida de su hija «hubiera corrido peligro de no ser por la llamada del vecino a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad».
En otro orden de cosas, la Guardia Civil de Llucmajor ha detenido a un alemán de 30 años y a una húngara de 31 como presuntos autores de un delito contra la salud pública tras incautarles un total de 60 plantas de marihuana con un peso superior a cuatro kilos en un registro domiciliario.
Los detenidos son residentes en la localidad del Arenal de Llucmajor, donde tenían instalada una plantación de marihuana en una de las habitaciones, con un complejo sistema de ventilación que desembocaba en el patio de luces del edificio.
Finalmente, la Guaridia Civil de Santa Margalida ha detenido a una mujer de 38 años como presunta autora de un delito de robo de una cartera, así como de 800 euros que extrajo posteriormente de un cajero con una de las tarjetas de crédito que había en el interior.
