Los Mossos d’Esquadra han detenido a un conductor temerario que trató de sacar de la vía a un coche patrulla cuando intentaban interceptarle por la autovía A-2, entre Cervera y Tàrrega (Lleida), y que llegó a circular a 180 kilómetros por hora.
Según ha informado a Europa Press la policía catalana, tras una persecución de unos 30 kilómetros pudieron reducirle gracias a un control policial instalado especialmente para él cerca de la salida de Alpicat.
Todo empezó con una llamada de un conductor la madrugada del domingo porque un coche con matrícula francesa les había chocado por detrás y después lateralmente, tratando de sacarles de la carretera, en el Eix Transversal, la C-25.
Después, el infractor siguió su camino a toda velocidad, aunque la víctima le siguió de lejos dando puntualmente información a la policía de dónde se ubicaba, hasta que una patrulla dio con él en la A-2, sentido Zaragoza.
El hombre, Gérard François Leonel V., francés de 33 años, hizo caso omiso a los avisos de la policía para que parara y les trató de sacar de la carretera con choques laterales, logrando darse a la fuga a gran velocidad.
No fue hasta que le pincharon las ruedas en el control policial gracias a una banda con pinchos que perdió el control del vehículo y se salió de la vía, momento en que los agentes le detuvieron después de que se mostrara muy violento y con signos evidentes de haber consumido alcohol y drogas.
Al arrestado le atribuyen los delitos de conducción temeraria, daños, desobediencia y negativa a realizar las pruebas de alcohol y drogas.
