El lugar se ha convertido en un polvorín a punto de estallar ante la indiferencia general
Son lustros de desenfreno donde el alcohol se desliza cada noche por la pendiente que hace de encrucijada a dos calles de Magaluf , allí donde confluye un letrero cuyo neón con el nombre de Punta Ballena parpadea como atónito, cuando tiene eso sí la suerte de no recibir un botellazo y apagarse.
A los vecinos y comerciantes de la zona les parecía más adecuado haber quitado ya la letra ‘n’ para dar fe de lo que piensan. Y es que no sólo se arma la gorda cada noche en el lugar que está repleto de bares y pubs, sino que la situación ha desembocado en un polvorín a punto de estallar y donde el día menos pensado los asiduos al ‘balconing’ se quedarán tan sólo como la guinda del pastel, o mera anécdota.
A FOLLAR Y A BEBER QUE NO PASA NADA
Los turistas británicos, el 95% ´de los juerguistas veinteañeros presentes, hace ya tiempo que bautizaron el lugar como ‘Shagaluf’, en referencia a la jerga que bebe del verbo to shag, que significa llanamente ‘a follar’.
El paso de los años y el boca a boca, ha hecho que se vayan envalentonando aún más ante la indiferencia de quien debería tomar cartas en el asunto, y la clara impotencia de la eficiente Policía Local de Calvià, que se las ve y se las desea para atajar tanto navajazo, tanto robo y la creciente invasión de prostitutas nigerianas de ‘mano fácil‘ como escenario de fondo de los habituales comas etílicos, y la consiguiente defenestración de muchos asiduos en esa aburda moda llamada ‘balconing‘.
DENUNCIA A RAJOY
De vez en cuando vuelve a salir a la palestra el problema de cara al gran público, como es ahora el caso, ya que a un valiente bonaerense se le ha ocurrido echar una mano subiendo un vídeo a You Tube donde se plasma uno de los muchos incidentes que acontecen en Punta Ballena, esta vez con fecha del pasado 11 de junio, y que se ha convertido ya en todo un fenómeno viral.
El mismo le ha sido remitido por el aludido, Javier Pierotti, quien lleva trabajando en la zona hace dos décadas, no sólo al presidente del Gobierno Mariano Rajoy, sino al Govern balear, al ayuntamiento de Calvià, a la Fiscalía General del Estado y al Consulado británico.
En su misiva advierte a los señores del Gobierno» y responsables directos, que «están cometiendo año tras otro un acto de negligencia»:
«Era mi deber tras muchos años. En este tiempo nadie ha hecho nada. Existe una actitud de resignación entre comerciantes, propietarios de bares y vecinos. Si pasa algo grave, nadie podrá decir que no estaba avisado». Lucho por un Magaluf que no sea vergonzoso. Este es mi último año trabajando aquí».
INFIERNO EN LA CARRETERA
Por si alguien tiene alguna duda basta echarle un vistazo al vídeo sobre estas líneas. El infierno que pasaron los conductores de varios vehículos durante casi una hora para abrirse paso por la famosa calle entre una turba enloquecida, es más que un triste y lamentable botón de muestra.
La Playa de Palma, mientras tanto, ya sigue sus pasos. La imagen de Mallorca como destino turístico se degrada incomprensiblemente.