La caja negra indica que el tren siniestrado a cuatro kilómetros de Santiago se salió de la vía a 153 kilómetros por hora
El tren Alvia a Ferrol que descarriló en la curva de A Grandeira circulaba a 192 kilómetros por hora en el momento previo al accidente.
Según los datos extraídos de las dos cajas negras, segundos antes del siniestro se activó un freno y el tren se salió de la vía a 153 kilómetros por hora.
Del audio almacenado en las cajas negras, y cuya información fue volcada esta mañana en presencia de la policía científica y del juez titular del número 3 de instrucción, Luis Aláez, se ha podido saber también que el maquinista estaba hablando por teléfono con personal de Renfe, que parece ser un controlador, en el momento del siniestro.
Minutos antes de la salida de vía recibió una llamada en su teléfono profesional para indicarle el camino que tenía que seguir al llegar a Ferrol.
Del contenido de la conversación y por el ruido de fondo parece que el maquinista consulta un plano o algún documento similar en papel.
Estaba hablando por teléfono con un compañero en el momento en el que se produjo el descarrilamiento, tal y como informa ABC.