Tras once años de idas y venidas con la piscina ilegal de Pedrojota Ramírez, desde que un grupo de activistas entrara a su propiedad de Costa de los Pinos (Mallorca) para darse un chapuzón con el objeto de demostrar que ocupaba un espacio público, las posibles faltas de lesiones o de coacciones han prescrito.
La magistrada que debía juzgar a los ocho manifestantes que entraron en la piscina ilegal con el del periodista, situada en una zona público marítimo terrestre, quedaron absueltos, tras el acuerdo alcanzado entre la fiscalía y los abogados defensores. También se absolvió a las tres personas del equipo de seguridad del periodista, que tuvieron que utilizar la fuerza y provocaron lesiones a algunos de estos manifestantes para evitar que pudieran acceder a la vivienda.
El escrito de acusación que entregó la fiscalía detalla que este incidente, que fue noticia a nivel nacional, ocurrió en la mañana del día 13 de agosto de 2005 en la Costa de los Pinos. Esa mañana el Lobby per la Independència, encabezado por el activista Jaume Sastre, convocó una rueda de prensa, en la que asistieron representantes de partidos de izquierdas y grupos ecologistas. Se reclamaba el derecho de paso por la zona de dominio público ocupada por la piscina.
Jaume Sastre, una vez concluido el juicio, manifestó su queja de que el juzgado hubiera tardado tanto tiempo en tramitar este asunto. El activista señaló que diez años después de producirse esta manifestación la situación actual de la piscina ilegal de la casa de Pedrojota Ramírez sigue siendo la misma.
La Audiencia Nacional reconoció en 2009 el uso público de la piscina construida junto al chalé que tiene el ex director de El Mundo en la urbanización de la Costa de los Pinos (Son Servera), en la isla de Mallorca.
En dos sentencias que estiman parcialmente los recursos presentados por el líder del Lobby per la Indepedència, Jaume Sastre, el tribunal considera que el terreno que ocupa la piscina en el borde del mar «se sitúa claramente dentro del dominio público» y que por tanto el periodista no tiene ningún derecho sobre la citada instalación.