Las primeras dos jornadas de la investidura ‘fallida’ de Pedro Sánchez están dejando mucho que contar de puertas adentro del hemiciclo pero también en las inmediaciones de las Cortes Generales.
Sea o no de nuevo presidente del Gobierno, a Sánchez se le recordará por su enorme ‘ego’ y en ese pensamiento debemos encontrar la explicación al enorme dispositivo de seguridad que, sin precedentes hasta ahora, se ha desplegado este lunes y este martes en el patio del Congreso de los Diputados, sencillamente para proteger el vehículo oficial del presidente en funciones, Pedro Sánchez, una vez aparcado en la puerta que da acceso al hemiciclo y la zona de Gobierno.
Hasta un total de quince agentes de la Policía Nacional protegían bajo el sol de justicia que cae sobre Madrid (más de 40 grados al sol) el Audi A8L blindado del jefe del ejecutivo para evitar que periodistas e incluso diputados –o todo aquel que contase con una acreditación para acceder al Congreso- se pudieran acercar a él.
Esa desmesurada escolta y cordón policial, más de quince agentes, permaneció desplegados mientras Sánchez permanecía en el interior del Congreso, pese a tener que andar tres metros desde la zona de Gobierno hasta el coche.
Con este dispositivo, que ordena la presidenta del Congreso Meritxell Batet a la comisaria jefa de la Comisaría especial de las Cortes Generales, los policías han impedido que nadie se acercase al presidente en funciones, una vez finalizadas las dos sesiones (lunes 22 y este martes 23) del debate de investidura, antes de marcharse de vuelta a La Moncloa.
Pero la desmedida seguridad no se limitaba a esa quincena de policías uniformados que hacían un infranqueable pasillo para evitar el contacto de Sánchez con diputados y periodistas…
Por si fuera poco, otros 20 agentes de la Comisaría de las Cortes vestidos de paisano y destinados a la seguridad interna del Congreso reforzaban ese cordón policial. A ellos, lógicamente, hay que sumar los escoltas personales del presidente del Gobierno, otra quincena, que también velaban por la ‘seguridad’ de Sánchez.
Con todo, medio centenar de agentes –a los que hay que sumar el numeroso despliegue de más de dos centenares de agentes de la Policía Nacional, con unidades especiales como la UIP o Unidad de Subsuelo, en el exterior- velaban por la seguridad de Pedro Sánchez en el interior del Congreso, algo nunca visto hasta ahora.
Periodista Digital ha recabado varios testimonios de miembros de la Policía Nacional criticando el “exagerado” despliegue policial que ha ordenado Batet y recuerda las “pésimas condiciones laborales con muchas horas expuestos al sol, sin descansos y relevos”.
