La situación terrorífica fue noticia el pasado sábado, ese día en la madrugada un barrendero halló a una mujer inconsciente, tirada en el suelo, con poca ropa y “cubierta de sangre”. Estaba expuesta a una temperatura de 5 grados.
Se trataba de Ksenia Puntus, una joven modelo rusa que había caído desde una tercera planta y se encontraba en estado grave, los paramédico no pudieron hacerla volver en sí, tuvo que ser operada de emergencia, en dos oportunidades y para recuperarla.
La joven terminó con graves lesiones en la cabeza, en el pecho, con algunos huesos rotos y con lesiones en la pelvis, las piernas y las costillas.
Al momento de sufrir el accidente, la modelo estaba en el piso de su pareja, un chico de 20 años, muy cercano al poder ruso, su nombre es Andrei Bakov y es nieto del cineasta Nikita Milhalkov, quien es un férreo defensor de Vladimir Putin.
«Ella está consciente pero apenas puede decir nada a causa de sus heridas en la cabeza», dijo la manager de la chica, Lilya Chepigina.
La policía intervino el piso de donde cayó Puntus, y a partir de allí inició una investigación para determinar los responsables del crimen, mientras también se procesan denuncias por encubrimiento.
Según testimonios obtenidos por un diario ruso, «el hombre que encontró a la chica fue interrogado, al igual que el propietario del piso que supuestamente visitó», pero por la gravedad del accidente no ha sido posible tener declaraciones de la modelo.
Alesya Kafelnikova, amiga cercana de la modelo rusa afirmó que esta «no recuerda nada excepto su nombre».
«Es increíblemente triste, estamos rezando por ella», afirmó Kafelnikova.