Dos mujeres de Mulberry, en Florida, creían tener todo bajo control cuando decidieron ejecutar su plan de hurto en un Walmart de la ciudad.
Ocurrió el 12 de julio de 2020; ambas, con un descaro y desvergüenza sin igual, colocaron un televisor de 65 pulgadas en un carro para tratar de salir disimuladamente del comercio (como si lo hubieran pagado) y llevárselo por la cara. Según apuntan desde la Oficina del Sheriff del condado de Polk, en la cesta llevaban otros productos tecnológicos de menor dimensión.
Tal y como muestran las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad, una de ellas salió de la tienda como si nada, y la otra le siguió con el resto de mercancías robadas. Fue a esta a quien el vigilante le preguntó por el ticket. «Lo he perdido», replicó. Repentinamente, inició una discusión con el trabajador mientras su compinche aprovechaba para introducir los artículos en el vehículo.
Finalmente, ambas consiguieron escapar con gran parte de los aparatos, a excepción de la pantalla de plasma. Ahora las autoridades piden colaboración a la ciudadanía para identificarlas y localizarlas.
“El vídeo de las cámaras de seguridad tiene buena calidad, por lo que estamos seguros de que alguien las reconocerá. Ha sido un intento de robo bastante estúpido. A nadie se le ocurre robar una tele que es más grande que sí mismo”, han apuntado los agentes.