La adquisición de una importante mansión de París estuvo acompañada de un terrorífico descubrimiento.
La propiedad, en el corazón de la capital francesa, se vendió por más de 35 millones de euros, o más de 22.000 euros el metro cuadrado.
El precio resultó inesperado ya que que todo el edificio se puso a la venta por tan solo 6 millones de euros. Sin embargo, no era la única peculiaridad del inmueble.
El cuerpo de un hombre momificado fue descubierto a finales de febrero, un mes después de su venta.
El cadáver fue hallado por los técnicos de una empresa encargada de asegurar el local antes de su rehabilitación. Aplastado bajo tablas y escombros, el cuerpo fue encontrado en un sótano de difícil acceso.
La fiscalía de París abrió una averiguación previa y confió las investigaciones a la brigada criminal.
Los primeros elementos de la investigación revelaron rastros de fracturas y heridas de arma blanca en el cadáver.
«Se dice que es un hombre que puede ser clasificado como vagabundo, con problemas de alcohol», según una fuente policial citada por Le Monde.
Para evitar el acceso a otros ocupantes ilegales, se talaron puertas y ventanas. Además, según la investigación, la muerte se remonta a treinta años. O el tiempo que la propiedad ya no estuvo habitada …
