Jonathan Andrés Zuluaga Celemín, también conocido como “Nené” o “Snoopy”, es un sicario bestial

La Policía Nacional atrapa en Madrid al ‘Satanás’ colombiano: autor de más de 100 asesinatos

En su siniestro historial se incluye hasta su suegra, a la que apioló por unas deudas

La Policía Nacional atrapa en Madrid al 'Satanás' colombiano: autor de más de 100 asesinatos
Jonathan Andrés Zuluaga Celemín, alias “Nené” o “Snoopy”. PD

Cayó como un conejo el ‘Nene’.

Agentes de la Policía Nacional, en colaboración con la Policía Nacional de Colombia e INTERPOL, han detenido en Madrid al que en su país le denominan, entre otros alias, como ‘El Satanás’, por la cantidad de crímenes cometidos y la maldad desplegada en sus actividades delictivas, según fuentes de la investigación.

Jonathan Andrés Zuluaga Celemín, también conocido como “Nené” o “Snoopy”, es un sicario al que le constaban dos reclamaciones judiciales internacionales interpuestas por diversos delitos de asesinato y homicidios.

Se le atribuye la autoría intelectual y material de más de 100 muertes, entre ellas la de su suegra, que cometió, presuntamente, como venganza por un posible hurto de dinero propiedad de su organización.

Ha sido detenido en España en otras dos ocasiones, En 2012, fue incluso extraditado a Colombia donde obtuvo la libertad tras aducir que padecía problemas sanitarios en prisión.

En 2015, fue de nuevo arrestado, pero defectos de forma impidieron su ingreso en prisión, momento que aprovechó para volver a España.

En 2019, en un control de seguridad ciudadana de la Policía Nacional, fue detenido, pero las autoridades colombianas no enviaron a tiempo la documentación necesaria para proceder a una nueva extradición.

Quedó en libertar y ahora ha sido de nuevo capturado.

Las investigaciones policiales comenzaron cuando las autoridades de Colombia emitieron dos notificaciones para la localización y detención del fugitivo por diferentes delitos contra la vida, homicidios y asesinatos, cometidos todos ellos en su país de origen.

También se le acusaba del delito de concierto para delinquir, así como de fabricar, traficar, portar o tener armas de fuego, accesorios, partes o municiones.

Con esta información, se iniciaron las gestiones para dar con su paradero y proceder a su detención. Debido a la extrema gravedad de los hechos cometidos, se le asignó máxima prioridad a su localización, teniendo en cuenta, además, la alerta que hacía referencia a su peligrosidad y propensión a la evasión.

En primer lugar, se inició un intenso trabajo de intercambio de información operativa con la Policía Nacional de Colombia Fue monitorizado conjuntamente el entorno del prófugo en Colombia y España.

Se observó que sus familiares se desplazaban con frecuencia entre ambos países utilizando el avión como medio de transporte, por lo que se coordinaron los seguimientos intercontinentales de los mismos.

Y se complementó con el control de los movimientos y con el estudio de bienes patrimoniales de todas las personas relacionadas, lo que llevó a una serie de lugares y domicilios en Madrid relacionados con el objetivo.

De esta manera, se logró obtener la ubicación de la pareja afectiva del fugitivo, quien fue localizada junto a un niño, posible hijo del buscado.

Tras articularse un dispositivo de vigilancia, se observó que contactaba con el que parecía ser “Satanás”, que se encontraba a bordo de un vehículo. Fue entonces cuando se procedió, de forma inmediata, a su detención.

El arrestado es considerado por Colombia como el cabecilla de la banda criminal internacional denominada “La Cordillera”, una organización que tiene influencia en varios departamentos y que cuenta con ramificaciones internacionales a lo largo de todo el mundo. Extendía sus actividades a Europa. Además, Panamá, Estados Unidos, México y Cabo Verde.

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