Un extraño suceso aumenta la tensión entre Rusia y Estados Unidos.
Las autoridades soviéticas hallaron el cadáver de una estudiante estadounidense que desapareció hace varios días y arrestaron a un hombre bajo sospecha de asesinato, reportaron medios locales.
El cuerpo de Catherine Serou, de 34 años, fue encontrado en una zona boscosa cerca de la ciudad de Bor, a 400 kilómetros al este de Moscú, según los reportes.
De acuerdo con los reportes noticiosos, Serou fue vista por última vez el martes luego que subiera a un auto. Su madre, Beccy Serou, de Vicksburg, Mississippi, dijo a NPR que su hija le había mandado un mensaje de texto diciendo: “Voy en un auto con un extraño. Espero que no esté siendo secuestrada”.
La madre explicó que su hija tenía prisa por llegar a una clínica y quizá subió a un vehículo que pasaba por el lugar. “Creo que cuando vio que la persona no conducía hacia la clínica, sino hacia un bosque, entró en pánico”, declaró la madre. Ella mantenía la esperanza de encontrarla con vida ya que se trata de una ex marine estadounidense que estuvo desplegada en Afganistán.
El Comité de Investigaciones de Rusia informó en un comunicado que el cadáver de una mujer fue hallado en Bor y que un sospechoso con un historial de delitos había sido arrestado, pero no dio nombres ni reveló la causa de muerte de la mujer.
Según los datos que divulgó, es un residente de Nizhni Nóvgorod nacido en 1977 que, según ellos, había sido “condenado repetidamente por delitos graves y especialmente graves”.
Catherine Serou se mudó de California a Rusia en 2019 para estudiar Derecho en una universidad en Nizhny Novgorot, una ciudad importante contigua a Bor, publicaron los medios de noticias. Su plan era regresar a Estados Unidos para seguir una carrera como abogada de inmigración.
Los equipos de búsqueda y los voluntarios habían estado buscando a Serou en una zona boscosa de las afueras de la ciudad, donde se captó su señal telefónica por última vez.
La embajada de Estados Unidos en Moscú confirmó la muerte de la mujer y dijo que estaba “siguiendo de cerca” la investigación de las autoridades rusas.