LOS HERMANOS DE SARA PARTICIPAN EN 'ESPEJO PUBLICO'

Máxima indignación en la familia de la chica fallecida por una lipoescultura por lo que el cirujano le dijo al juez

"Estuve a punto de mandarla a planta cuando estaba más estable en reanimación pero como no terminaba de estar perfecta la mandé a la UCI"

Los hermanos de Sara Gómez en Espejo Público
Los hermanos de Sara Gómez en Espejo Público

En enero de este 2022, una joven, Sara Gómez, de 39 años fue ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Santa Lucía por graves lesiones después de operarse de una lipoescultura en una clínica privada en Cartagena, Murcia.

La intervención duró un total de cinco horas y el doctor al frente de la operación informó al acompañante de Sara de que todo había salido como se esperaba, pero que la estaban estabilizando porque había perdido muchos líquidos y sangre durante la operación.

Tres horas después, el médico decidió trasladarla al hospital público Santa Lucía donde ingresó en estado de «shock hipovolémico y en una situación de extrema gravedad«. Lamentablemente, al mes de ser ingresada, Sara falleció como consecuencia de las múltiples perforaciones y lesiones en varios órganos: riñón, hígado, duodeno, colon e intestino.

El abogado de la familia, Ignacio Martínez, afirmó que esas lesiones son «más propias del resultado de una reyerta con arma blanca» que por una operación estética. La familia, pidió a la Fiscalía que el cirujano y la anestesista de la operación aportasen documentación que acreditase su formación y el resultado de un análisis toxicológico.

Ahora, casi medio año después, el cirujano está siendo investigado por falsedad y estafa. Éste se publicita en las redes sociales afirmando estar colaborando con los mejores médicos del mundo, sin embargo, a pesar de que la Fiscalía le pidió que entregase documentos que demostrasen la experiencia que tiene, no lo ha hecho.

Los hermanos de Sara, han hablado en Espejo Público, programa de Antena3, donde han expresado su indignación porque el cirujano afirmó ante el juez que todo había salido bien.

«Estuve a punto de mandarla a planta cuando estaba más estable en reanimación pero como no terminaba de estar perfecta la mandé a la UCI«.

En su alegato, también afirmó que Sara no había sangrado mucho, sino que era «como agua de lavar carne».

Nora y Rubén, los hermanos de la fallecida, piden que se modifique la ley de la publicidad sanitaria porque a pesar de que haya personas que le pueden echar la culpa a Sara por no haberse informado y contrastado bien la formación de quien le iba a operar, no tendría porque hacerlo.

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