Las Cervantas y Miguel el manco

Una trama de suspense para acercarse a la vida íntima del escritor y su familia

Las Cervantas y Miguel el manco
Las Cervantas - Naves del Español

Escribir un enigma policíaco basado en un oscuro episodio de la vida de Cervantes, hacerlo con respeto a los hechos históricos, precisión científica y pluma excelente, no es cualquier cosa. Esta pieza será recordada entre lo mejor de las conmemoraciones del cuarto centenario de su fallecimiento.

Ha estado tres semanas en las Naves del Español tras haber pasado por casi todos los festivales veraniegos de teatro clásico. Se le ocurrió a una de las actrices que la interpreta, Gracia Olayo, y fue encargada por la Biblioteca Nacional de España a un dúo de escritores -Inma Chacón y José Ramón Fernández-, este último curtido versionista y uno de los mejores, fiel a los autores y no como otros cuyo nombre callamos.

El suceso ocurrió en la noche de 27 de junio de 1605: un caballero herido pide auxilio en las escaleras de una casa vallisoletana donde vive el escritor Miguel con cinco mujeres, sus dos hermanas Andrea y Magdalena, su hija Isabel, su sobrina Constanza y su mujer Catalina. Es un suceso cierto y bien cierto. El herido muere en casa de una vecina sin revelar el nombre del asesino o asesinos. El alcaide, que oculta una prueba importante, encubrirá al asesino enlodando el sumario y, junto a otros sospechosos, enviará a la cárcel al escritor, a una de sus hermanas, a su sobrina y su hija, que regresarán a casa bajo un arresto domiciliario que durará seis días.

Hace calor,  por las ventanas se cuela el olor nauseabundo del río Esqueva agonizando en el largo estío. Mientras las Cervantas esperan ser interrogadas, preparan sus declaraciones para evitar posibles contradicciones, y digámoslo todo, ocultar ciertos hechos. Conoceremos así a las mujeres que vivieron con el autor de El Quijote e influyeron en su literatura; sus miedos, sus fortalezas y sus modos de enfrentarse a la vida en una época en la que una mujer independiente y lectora resultaba sospechosa, máxime cuando como estas, mantienen amoríos extramatrimoniales para salir adelante en la vida.

El minucioso engranaje de una intriga que no desmerecería ante las de Agatha Crhstie, se va desarrollando implacable hasta descubrir los secretos de todas y la relación con los hechos de una de ellas. Cinco mujeres que forman una familia muy de hoy, de esas desestructuradas, alrededor de un hombre siempre ausente.

Con un texto lleno de alusiones a la vida y obra del soldado herido en Lepanto, bien urdido entre la acción presente y la información contextual sobre los personajes, que suena a cervantino sin dejar de ser actual, Fernando Soto dirige una puesta en escena ingeniosa pero lastrada por su aspecto elemental, lo que coloca a la forma muy por debajo del fondo en este espectáculo. Es posible que la culpa la tenga un presupuesto de producción demasiado pacato, indigno del lugar y la ocasión. Una escenografía tan elemental como dos percheros y unas maletas, un vestuario informal y una iluminación estática sólo se ven realzados por las ilustraciones musicales en directo de un providencial chelo.

Afortunadamente el elenco femenino se suma al texto para inclinar la balanza del lado positivo. Las hermanas Olayo, -Gracia y Sole-, se encargan de acercarnos a Andrea y Magdalena, las dos hermanas de Cervantes, mientras Yaël Belincha quiere ser la esposa Catalina, y las tres nos presentan personajes poco definidos, especialmente en el último caso. Irene Ruiz hace a la sobrina Constanza, mosquita muerta con mucho bajo el tocado, y Clara Berzosa a la hija bastarda, una descarada Isabel que es la mejor trazada del quinteto. Con la pieza ya muy rodada han terminado por identificarse de forma notable con unos personajes femeninos de difícil representación, sin que consigan convencernos del todo.

Escribe J. Francisco Peña en ‘Las mujeres en la vida de Cervantes’, que ‘ninguna de las hermanas de Cervantes se casó, lo que no quiere decir que no tuvieran relaciones con  hombres. De  hecho, las  hermanas de Cervantes, siguiendo, quizás la tradición de su tía abuela, mantuvieron su independencia económica, lo que en su época sólo se podía conseguir aprovechándose de los hombres, frente a la estructura social que condiciona la vida de la mujer al matrimonio y, por tanto, al enclaustramiento. Asumió la vida  liberal de sus hermanas con toda la dignidad del mundo y nunca puso ninguna traba al  desarrollo de su actividad’.

Cuando huyendo de habladidurías, don Miguel se vuelva en 1606 a Madrid trayendo a las cinco hembras con él e instalándose en el actual Barrio de las Letras, Andrea  y  Magdalena  entrarán  en  la  Orden  Tercera  de  San  Francisco.  Andrea  morirá  en  1609 y Magdalena en 1610. Catalina morirá en 1620 tras encargarse de la edición del Persiles. 

Dice Peña que la actitud de Cervantes contrasta notablemente con la de Lope de Vega. Las mujeres que aparecen en la obra de Cervantes tienen un carácter y una actitud social  muy distinta a la que presentan las de Lope de  Vega.  La  actitud  de  Cervantes  es  mucho  más  comprensiva  que  la  de Lope por lo que, su teatro es totalmente innovador respecto a la condición social de la mujer. Podemos ver una actitud tolerante de Cervantes en las relaciones extramatrimoniales de muchas de sus heroinas: La Leonora, de “El celoso extremeño”, doña Leoncia en “El viejo celoso”, Luisa en el  “Persiles”,  Camila  en  “El  curioso  impertinente”… En  “La  Galatea”,  Gelasia afirma: Libre  nací  y  en  libertad me fundo. Preciosa, la protagonista de “La gitanilla”, dice: ‘Estos señores -los patriarcas gitanos- bien pueden entregarte  mi  cuerpo;  pero  no  mi  alma,  que  es  libre  y  nació  libre,  y  ha  de  ser  libre  cuanto  yo quisiere. En La entretenida presenta  a  unas  mujeres  que  mantienen  su  independencia  y  libertad  por  encima  de  las  ataduras  sociales.  Entre los capítulos XII y XIV de la primera parte de “El Quijote”, uno de los cabreros le cuenta a don Quijote la historia de la pastora . Es una de las primeras historias de la literatura en las que el papel de la mujer aparece destacado con toda su plenitud. Marcela,  en  un  discurso  memorable,  insiste  en  su  condición  de  mujer  libre  y  en  su identificación  con  la  naturaleza.

Las Cervantas comienza con Isabel leyendo a esta Marcela. En la última representación en Madrid, el pasado domingo, había lleno absoluto y pleno femenino, con aplausos largos y tendidos para una bonita despedida.

Aproximación al espectáculo (del 1 al 10)
Interés, 9
Texto, 8
Dirección, 7
Escenografía, 6
Interpretación, 7
Iluminación, 5
Vestuario, 5
Música, 7
Producción, 5
Documentación para los medios, 7
Programa de mano, 7

Naves del Español – Sala Max Aub
Las Cervantas, de Inma Chacón y José Ramón Fernández
Del 20 de octubre al 13 de noviembre de 2016
90 min. (sin descanso)

Dirección – Fernando Soto
Reparto
    Gracia Olayo – Andrea
    Sole Olayo – Magdalena
    Clara Berzosa – Isabel
    Irene Ruiz – Costanza
    Yaël Belicha – Catalina
Ficha artística
    Música Original Jose Luis López
    Música En Vivo Jose Luis López y Marina Barba
    Escenografía Mónica Boromello
    Vestuario Marta Martín?Sanz
    Iluminación Javier Ruiz de Alegría
    Diseño Gráfico E Imagen Olga Iáñez
    Ayudante De Dirección Mely Herrero.
    Producción Ejecutiva Dania Dévora Y Santiago Pérez
    Una producción de DD&COMPANY y EscénaTE.

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Autor

José Catalán Deus

Editor de Guía Cultural de Periodista Digital, donde publica habitualmente sus críticas de arte, ópera, danza y teatro.

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