Paul George, una de las nuevas estrellas de la NBA, autor de un mate icónico y titular en el All Star.
Ha protagonizado el primer gran escándalo sexual del año en el país de las barras y estrellas. Según se publican los medios de aquel país, el jugador de los Pacers ha ofrecido un millón de dólares por abortar a una famosísima stripper y candidata a modelo a la que dejó embarazada en un esporádico romance de una sola noche.
El mayúsculo escándalo sube en morbo cuando trasciende que la novia de George es Callie, la atractiva hija de Doc Rivers (entrenador de los Clippers).