Una mezcla de avatar con patas de avestruz y bolsa de canguro

Así sería el cuerpo humano ‘perfecto’ y ni se parece a lo que siempre has imaginado o te han dicho

Una anatomista británica recrea cómo podría mejorarse el cuerpo humano al cambiar nuestras características menos exitosas por otras que han evolucionado de forma eficaz en distintos animales

Así sería el cuerpo humano 'perfecto' y ni se parece a lo que siempre has imaginado o te han dicho
El cuerpo humano 'perfecto', según Alice Roberts. PD

Somos plenamente conscientes de que el cuerpo humano no es perfecto, en especial cuando se lo compara con otros seres vivos.

No somos los más rápidos ni los más fuertes, y necesitamos cumplir con parámetros muy específicos en lo que se refiere a agua, alimentación y clima, aunque no hemos perdido nuestra capacidad de adaptación e improvisación.

Aún así, los científicos creen que la evolución podría haber entregado un par de cartas más favorables, y eso los lleva a imaginar.

¿Cómo sería un cuerpo humano optimizado? ¿Qué características exitosas podría haber copiado de otros animales?

La anatomista Alice Roberts trató de responder a ambas preguntas con su diseño Alice 2.0, y el resultado, te deja las orejas de punta… literalmente.

Lo que ha diseñado la popular antropóloga británica como ‘cuerpo humano perfecto’ no se parece en nada a lo que la mayoría de los mortales tenemos en mente.

El proyecto es parte de un programa especial de la BBC llamado «Can Science Make Me Perfect?», pero siendo sinceros, esta no es la perfección que habíamos imaginado.

A la doctora, conocida entre sus colegas por quejarse de los numerosos fallos de nuestro «diseño» corporal, se le planteó el desafío de hacer una versión mejorada de sí misma con la ayuda de zoólogos y artistas.

El resultado puede que sea un ser superior, pero resulta escalofriante.

En una resumida descripción, ese cuerpo perfecto es una mezcla de avatar con patas de avestruz y bolsa de canguro.

Ese es el aspecto a simple vista, pero todo en este organismo tiene un motivo justificado, nada está al azar.

Para empezar, Roberts explica en su blog que mejoró la visión conectando los ojos como lo hacen los pulpos, de forma que se elimina el punto ciego que nuestro cerebro tiene que recrear.

Para mejorar aún más la vista, eligió que los globos oculares fueran un poco más grandes.

Como perdemos la audición de alta frecuencia a medida que envejecemos, Roberts eligió unas orejas grandes y felinas.

Para evitar la asfixia, optó por separar por completo las vías respiratorias del pasillo para la comida, que nosotros tenemos juntos en un pequeño tramo y que puede dar lugar a accidentes, algunos mortales.

Además, considera más eficiente el sistema respiratorio de las aves.

En ellas, el aire ingresa a los sacos accesorios en el abdomen y el tórax, que luego se contraen para mantener el flujo del aire a través de los conductos de los pulmones en una dirección, en vez de nuestro sistema bidreccional en el que el aire entra y sale por el mismo camino.

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