¿Te apetece una pizza de pollo? Te presentamos dos opciones una con tomates cherry y champiñones, otra con espinacas baby. Se tardan unos 15 minutos en todo el proceso y quedan crujientes y jugosas.
En otro artículo de Periodista Digital hablamos de la receta de lasaña de carne, hoy de la pizza de pollo casera.
El origen de la pizza
La pizza surgió en Italia en el siglo XIX, en la ciudad de Nápoles, aunque desde la época romana ya se preparaban unos panes planos llamados focaccia.
Estas recetas se elaboraban con aceite de oliva y hierbas aromáticas. Son ‘los antepasados’ de las pizzas, y todavía se siguen preparando en Italia.
Para acercarnos a la historia de esta receta tan universal, nos situamos en la zona portuaria de Nápoles. Esta ciudad tuvo gran importancia en el tráfico de mercancías durante los siglos XVIII y XIX.
Atraídos por una vida mejor, la población creció en la zona de la bahía. La disponibilidad de recursos era poca, por eso se consumían alimentos baratos que se pudieran tomar de forma rápida sin necesidad de cubiertos. Las pizzas eran el bocado perfecto.
Las primeras pizzas, —no eran tal como las conocemos hoy—. Consistían en una masa plana, parecida a las focaccias, a las que se añadían, queso, aceite, ajos y anchoas.
Estas ‘pizzas’ se consideraban ‘comida de pobres’, la burguesía y clases pudientes los rechazaban.
El tomate llegó a Italia procedente de España en el siglo XVII, pero no sería hasta el XVIII cuando se haría popular, (incorporándose también a las pizzas).
Una de las pizzas más conocidas y sencillas es la ‘Margarita’. Su nombre hace honor a la reina Margherita di Savoia esposa de Umberto I de Italia.
La leyenda dice: que durante un viaje de la pareja real a Nápoles, visitaron una pizzería de la ciudad, ‘Pizzería Brandi’ fundada en 1760.
La reina probó una especialidad con tomates, mozzarella y albahaca verde, que representaba los colores de Italia. A partir de entonces a esta pizza se la llamó Margherita.
Pizza de pollo con champiñones
Ingredientes
- Base de pizza congelada o precongelada – 1 unidad
- Tomate frito – 4 cucharadas
- Pechuga de pollo – 100 g
- Queso mozzarella – 80 g
- Tomates cherry – 6 unidades
- Champiñones de lata – 8 unidades
- Orégano seco – al gusto
- Sal – al gusto
- Pimienta – al gusto
Preparación
- La base de pizza puedes hacerla casera, o comprarla ya preparada, la opción más rápida.
- Si es congelada la base de pizza, dejarla descongelar en nevera unas horas antes.
- La pechuga la preparamos al vapor, previamente. A una cacerola le añades agua y la pones al fuego dejar que hierva
- Corta la pechuga en varios trozos.
- Coloca un colador apoyado en la cacerola, (pero sin que toque el agua). Introduce los trozos de pechuga.
- Dejar cocer 7 minutos, (no importa no se hagan del todo, ya que se terminan en el horno). Mientras la pechuga se hace puedes ir adelantando el paso siguiente.
- Forra una bandeja de horno con papel y coloca la base de pizza.
- Hornea sin ingredientes 3 minutos a 180 grados. Con este paso previo lograremos que la pizza nos quede más crujiente.
- Sacar la pizza del horno y añadir el tomate frito y un poco de orégano, sal y pimienta.
- Espolvorear queso rallado.
- Cortar trozos más pequeños de pollo, repartir por la pizza.
- Cortar los tomates cherry y añadir a la pizza.
- Agregar también los champiñones de lata bien escurridos.
- Hornear durante 8-9 minutos o hasta que esté dorada.
- Sacar del horno, y dejar reposar, si quieres se puede decorar con un poco de albahaca fresca.
Pizza con pollo y espinacas
Ingredientes
- Base de pizza congelada o precocinada– 1 unidad
- Pechuga de pollo troceada – 100 g
- Cebolla – ¼ de unidad
- Espinacas baby – 50 g
- Queso mozzarella – 150 g
- Aceite de oliva virgen extra – 2 cucharadas
- Sal – al gusto
- Pimienta – al gusto
- Orégano seco – una pizca
Preparación
- La base de pizza congelada la dejas en la nevera varias horas antes o incluso el día anterior. Si es precocinada la conservas en la nevera y la sacas un cuarto de hora antes.
- Cortar la pechuga de pollo en trocitos. Añadir un poco de aceite a una sartén, cuando esté ligeramente caliente cocinar la pechuga durante un par de minutos.
- Sacar las espinacas baby de la bolsa y refrescarlas debajo del grifo. Escurrir.
- Añadir sobre la pizza el queso mozzarella, las espinacas baby y la pechuga de pollo.
- Agregar un poco de orégano seco y hornear a 180º durante 11 minutos. Dejar reposar en el horno durante otros 2 minutos.
- Sacar del horno y dejar reposar antes de servir.
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