La leche frita gallega es otro dulce de sartén tradicional en Semana Santa, como las torrijas Su elaboración es muy sencilla, si sigues los pasos te saldrá a la primera, ¡no tiene pérdida!
Una receta casera tradicional con el inconfundible aroma de canela y limón. Si eres vegana te contamos una alternativa para disfrutar de este postre.
En otro artículo de Periodista Digital hicimos natillas caseras ‘de la abuela’, hoy otro postre lácteo, la leche frita gallega en dos versiones.
El origen de la leche frita
Se prepara en Galicia, en Valladolid, en Cantabria, Asturias o Valencia. Prácticamente en toda España. No se sabe con exactitud dónde surgió esta receta, por eso varias provincias reclaman su creación, como Palencia o San Sebastián.
Al tratarse de un postre con ingredientes sencillos, existen distintas variantes.
Hay quien añade canela, y quién no, ralladura de naranja en lugar de limón, maicena y harina a partes iguales para lograr una textura más cremosa. El resultado es un dulce de textura cremosa con un sabor que recuerda al flan.
Leche frita gallega tradicional
Ingredientes
Para la masa de leche
- Leche entera a temperatura ambiente – 1 litro
- Harina para todo uso – 60 g
- Maicena o harina de maíz – 60 g
- Azúcar – 120 g
- Huevos – 2 unidades
- Piel de limón – la de ½ limón
- Aceite de oliva sabor suave o de girasol – 100 ml
- Sal – una pizca
- Canela – 1 palito
Para el rebozado
- Harina – 120 g
- Huevos – 3 unidades
Para decorar
- Azúcar – 60 g
Preparación
La leche frita se compone primero de la masa de leche que nos tiene que cuajar para después rebozarla y freírla. Por eso es mejor hacer la receta de un día para otro.
- Del litro de leche separamos unos 400 ml, tamizamos la harina y la maicena sobre el recipiente donde tenemos la leche, usando un colador.
- Mientras tamizamos la harina de vez en cuando remueve la leche con unas varillas de cocina. Cuando tengas toda la harina incorporada bate un poco más para que nos quede integrada en la mezcla.
- A continuación en añadir dos huevos a la mezcla anterior, un poco de sal. Remover con las varillas para mezclar. Reservar para luego.
- En otra cazuela ponemos los 600 ml de leche que nos quedan, a fuego medio. Añadir piel de limón y el palito de canela en rama. Llevar a ebullición y apagar el fuego.
- Dejar que repose unos 10 minutos para que se aromatice la leche, retirar la piel de canela y el limón. Pasar la leche por un colador o chino (para evitar nos queden trocitos de canela o de limón).
- Una vez pasados diez minutos, vamos a combinar la mezcla de leche y harina del paso 1º, con los 600 ml de leche que acabamos de aromatiza. Añadir poco a poco la mezcla de leche y harina a los 600 ml de leche removiendo con las varillas. Tenemos que conseguir una textura cremosa parecida a la bechamel.
- Agregar, poco a poco el azúcar, primero una cucharada, y batir, a continuación otra y seguir batiendo, hasta terminar de integrar los 120 g de azúcar.
- Forrar un plato o fuente baja de unos 2-3 cm con papel film o papel de horno.
- Verter la mezcla en la fuente y cubrir con papel film. Dejar reposar y en cuanto puedas a la nevera. Debe reposar al menos 16 horas.
- Al día siguiente, verá que la mezcla ha cuajado y se puede cortar en porciones Además al poner papel film o de horno en la fuente no se nos quedará pegado.
- Cortar en porciones cuadradas o rectangulares del mismo tamaño la leche, de unos 4 cm.
Para el rebozado
- Prepara dos platos y un cuenco o bol. En el bol bate unos segundos los huevos. En un plato añade la harina que corresponde al rebozado, y en el otro plato papel de cocina
- Añadir a una sartén amplia, aceite de oliva suave o de girasol a fuego lento.
- Pasar primero las porciones por harina, sacudir un poco para eliminar el exceso.
- A continuación pasar las porciones por huevo.
- Aumentar el fuego a media temperatura, cuando esté caliente añadir las primeras porciones. Mientras seguimos rebozando las que nos quedan.
- Dorar aproximadamente un minuto por cada lado, retirar del fuego y dejar que reposen en el plato con papel de cocina, para eliminar el exceso de aceite.
- Dejar que se enfríen y servir, (se pueden acompañar con un poco de azúcar por encima).
Ingredientes
- Leche vegetal (almendras, avellanas, soja o arroz) – 500 ml
- Azúcar – 80 g
- Harina de maíz o Maicena – 2 cucharadas colmadas o 40 g
- Piel de limón – la de ½ limón
- Canela – 1 palito
- Aceite de girasol – 125 ml
Rebozado
- Harina para todo uso –50 g
- Maicena – 1 cucharada rasa o 10 g
- Leche vegetal – 30 ml
- Levadura en polvo – ½ cucharadita
- Canela en polvo – al gusto
Para decorar
- Azúcar – al gusto
- Canela – al gusto
Preparación
- En primer lugar vamos a aromatizar la mitad de la leche 200 ml, los otros 200 ml los dejamos en la nevera.
- En un recipiente añade la leche, la corteza de limón y el palito de canela.
- Ajustar el fuego suave, cuando hierva apagar el fuego. Tapar y dejar reposar.
- Pasado un tiempo, colar la leche usando un colador, para evitar pequeños trocitos de canela o de piel de limón.
- En la leche fría que tenemos en la nevera agregamos la maicena y removemos con un tenedor.
- En una cacerola más grande combinamos la leche fría con la maicena, la leche aromatizada y el azúcar.
- Remover ayudándote e unas varillas, ajustar el fuego a baja temperatura.
- Cocinar hasta que la mezcla espese (sobre los 40 minutos).
- Verter la mezcla de leche frita en una fuente metálica o de cristal.
- Cubrir con film de plástico procurando que el plástico toque la leche, así evitaremos la formación de costra.
- Conservar en la nevera al menos 5 horas antes de consumir.
- Pasado ese tiempo retirar de la nevera, cortar en porciones la leche frita.
- Para servir, espolvorear un poco de azúcar y canela.
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