¡No te pierdas esta frittata de calabacín, queda muy jugosa, y es una receta rica en proteínas! La frittata es la versión italiana de la tortilla, con huevo como ingrediente principal.
Es barata y fácil de preparar, por eso no suele faltar en los restaurantes de comida casera. En Italia usan una expresión: «hai fatto una frittata», que se traduce: has hecho un desastre.
La frittata se considera una receta de emergencia cuando no se tiene tiempo para cocinar, y se aprovechan restos de cosas que tienes en la nevera. En Periodista Digital hoy preparamos frittata de calabacín.
¿Diferencias entre frittata y tortilla?
Es cuestión de matices, ya que son recetas parecidas. Las frittatas son como quiches pero sin corteza, suelen ser gruesas, en España la tortilla de patata es más gruesa, pero si se trata de otro tipo de tortillas como ‘la francesa’ son finas.
La diferencia principal es que para hacer una tortilla, tenemos los huevos batidos en la sartén y luego añadimos los ingredientes.
En cambio en la frittata se cocina el ingrediente por separado, (en este caso los calabacines) y el huevo se añade sobre ellos,— por eso digo son matices, ya que se parece mucho a una tortilla—. A menudo a los huevos batidos se les añade queso parmesano o pecorino, y en las tortillas no siempre se añade queso.
Calorías y nutrientes del calabacín
Los calabacines son muy ricos en agua un 96%, esta es la razón para que tengan tan pocas calorías, solo 14 por ración de 100 g. El porcentaje de grasa es prácticamente nulo 0,2 g por ración. Sabiendo que tienen tanta agua, las proteínas al igual que la grasa son escasas, tienen 0.6 g por ración.
Entre las vitaminas, destaca la A o retinol, (4.5 ug) que nos aporta carotenoides, compuestos naturales como la luteína o la zeaxantina que benefician al sistema visual.
La deficiencia de vitamina A tiene efectos en la visión provoca un trastorno llamado xeroftalmia, el ácido fólico (13 ug), la vitamina C, (22 mg), la B1, (0.04), la B2, (0.04), la B3, (0.6).
Al ser rico en agua y tener 0.5 g de fibra, el calabacín es un alimento de fácil digestión adecuado en sopas o purés para dieta blanda o papillas infantiles.
Entre los minerales que contiene el calabacín, tenemos: el potasio con (140 mg), el calcio, (24 mg), el fósforo, (17 mg), selenio, (1 ug), hierro, (0,4 mg).
Los calabacines ayudan a nuestro sistema inmunológico, gracias a su acción antioxidante y los compuestos antiinflamatorios, entre ellos la vitamina A, la C, el glutatión peroxidasa y el superóxido dismutasa.
La mayoría de sus nutrientes están en la piel por eso es importante cocinarlos sin pelar. Aunque habitualmente lo encontramos con la piel verde intenso, también existen variedades con la piel en color verde claro, amarillo o incluso blanco.
Los antepasados del calabacín son las calabazas que surgieron en América, en la zona de México hace unos 7.000 años. Colón las trajo a Europa en el siglo XVI junto a otros nuevos alimentos como el tomate, la guindilla o el boniato.
El calabacín que hoy conocemos es un híbrido que surgió en Milán, en el siglo XIX. En el siglo XX, gracias a los inmigrantes italianos llegó a América en 1920 y su cultivo se fue extendiendo.
Hoy es una de las verduras más apreciadas por su sabor suave y su aporte nutricional. Incluso tiene su propio festival en Obetz, Ohio del 22 al 25 de agosto donde se celebra un desfile y se organizan concursos con el calabacín como protagonista.
Frittata de calabacín fácil
Ingredientes
- Huevos – 6 unidades
- Calabacines – 500 g
- Ajo – 1 diente
- Queso parmesano rallado – 60g
- Aceite de oliva virgen extra – 70 ml
- Sal –al gusto
- Pimienta – al gusto
- Zumo de limón – un chorrito
- Nuez moscada – una pizca
Para decorar
- Calabacines – 100 g
- Aceite de oliva virgen extra – un chorrito
Preparación
- Lavar los calabacines si son varios, la piel tiene muchos nutrientes por eso si lo pelas, deja al menos un poco de piel.
- Cortar los calabacines en rodajas, y luego las rodajas en cubos o trocitos.
- Rocía los calabacines con un poco de aceite de oliva y zumo de limón.
- Partir el ajo en varios trozos,
- Añade 60 ml de aceite de oliva a una sartén, cuando esté caliente agrega el ajo y dora un par de minutos. Luego retira de la sartén.
- Incorpora los dados de calabacín a la sartén. Sofríe durante 7 minutos.
- Transcurrido el tiempo, apagar el fuego y sazonar con sal y pimienta. Reservar en la misma sartén.
- En un recipiente aparte, batir ligeramente los huevos usando un tenedor o varillas.
- Sazonar con sal y pimienta los huevos.
- A continuación, agregar el queso rallado y la nuez moscada.
- Mezclar estos ingredientes.
- Encender el fuego y colocar de nuevo la sartén con el calabacín. Cuando esté caliente, agregar el huevo batido.
- Inclinar ligeramente la sartén para que el huevo se reparta por toda la sartén.
- Tapar la sartén con una tapa, y dejar que cuaje durante 8 minutos a fuego medio. Si tienes una sartén para tortillas te será más fácil dar la vuelta. Ladea la sartén para ver que la frittata se desliza, si se ha pegado a la sartén despegar con cuidado. Colocar sobre un plato.
- En la misma sartén cortar unas cuantas rodajas de calabacín y añadir un chorrito de aceite. Dejar que se sofrían un par de minutos.
- Volcar la frittata sobre las rodajas de calabacín. Dejar que se cocine 3 minutos.
- Retirar de la sartén usando el plato anterior. Ahora los calabacines en rodajas cubren la parte superior de la frittata.
- Deja reposar unos minutos y a comer.
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