Una vez más, Rougié se complace en presentar una nueva receta original, a saber, «Raviolis de Foie a la crema con setas y verduritas», una creación exclusiva que, elaborada por los consejeros culinarios de la firma en España, Marc Grañó y José Luis Paz, saca partido de los Raviolis de Foie Gras de la firma gala. Este producto es de una gran utilidad en la cocina, así, se presenta como una apuesta perfecta a la hora de crear entrantes y tapas, e incluso como plato principal. Elaborado bajo una rigurosa selección de la materia prima, sin aditivos ni conservantes, los Raviolis admiten un fácil y rápido tratamiento sin necesidad de descongelar, con un tiempo de cocción de 2 a 3 minutos. Se comercializan en dos modalidades, en envases de 250 gramos y de 1,5 kilogramos, en función de las necesidades del consumidor. La receta tiene un coste aproximado por persona aproximadamente de 3 euros, además de un tiempo medio de elaboración.
Preparación
PARA LOS RAVIOLIS: poner agua a hervir, añadir sal y tirar los raviolis directamente del congelador al agua en ebullición, la intensidad del fuego tiene que ser moderada, cuando e raviolis empiece a flotar retirarlos enseguida y con ayuda de un colador pasarles un poco de agua.
PARA LA CREMA: en una sartén saltear las setas, las verduritas lavadas y cortadas. Por último añadir el tomate cherry, seguido la nata, dejar cocinar 5 minutos a fuego suave, rectificar de sabor e incorporar los raviolis a la salsa. Emplatar.
El producto
RAVIOLIS de Foie Gras de Pato Ultracongelados (IQF), Estuche de +/- 25 unidades, Peso Neto: 250 gramos, Caducidad: 6 meses
RAVIOLIS de Foie Gras de Pato (IQF), Bolsa de +/- 145 unidades, Peso Netro: +/- 1500 G
Caducidad: 9 meses, Conservación : -18ºC
Acerca de Rougié
Rougié, empresa fundada en 1875 en la localidad francesa de Cahors, prosigue con su expansión internacional con el lanzamiento de nuevos productos siguiendo bajo sus principios fundacionales de elaboración de productos de la más alta calidad. La empresa, dirigida primero por Léonce Rougié y más tarde por su hijo, Jean Rougié, goza cada vez de mejor reputación hasta alcanzar su prestigio internacional en los años 50. La incansable búsqueda de la perfección de sus métodos de trabajo y de sus recetas le ha llevado a erigirse en emblema del buen gusto francés. Sus foies gras y sus trufas se sirven hoy en las mesas más prestigiosas del mundo. Rougié está presente en los palacios, en los mejores restaurantes, en las boutiques de lujo y en las compañías aéreas de 120 países de los 5 continentes.