Pasear por Palma una tarde de invierno se convierte en una ocasión ideal para ir a merendar y descubrir las cafeterías que más destacan por su historia, tradición y personalidad en el centro de la capital balear. Palma es una ciudad con mucho que ofrecer durante todos los meses del año. Pasear por sus calles una tarde durante los meses más fríos se convierte en la excusa perfecta para detenerse a degustar una deliciosa merienda en alguna de sus cafeterías más singulares e icónicas de la capital balear. Desde cremosos, aromáticos y deliciosos cafés elaborados con todo el mimo del mundo; chocolates de intenso sabor capaces de dejar huella en el recuerdo hasta los más originales smoothies, acompañados de complementos dulces y salados que convertirán el momento en un instante inolvidable y digno de repetir las veces que sea necesario.
Las mejores ensaimadas en Can Joan de S’Aigo
Para una ensaimada clásica o una taza de chocolate, Can Joan de S’Aigo ofrece el escenario perfecto. Fundado en 1700, es la cafetería más antigua de la ciudad y ha vivido lo suficiente como para posicionarse como uno de los lugares más afamados de Palma. De hecho, es el local preferido por la Reina Emérita Doña Sofía. Por las mañanas es muy usual encontrarse con una gran cola de gente esperando el desayuno. Algunas de sus especialidades son obviamente las ensaimadas, las cocas y, en verano, los helados artesanales, entre los que destacan los de almendra mallorquina y los de almendra. Un regalo para el paladar.
Natural y mediterráneo: Mala The Café
Ubicado en el centro histórico de Palma, Mala The Café presenta una oferta que va más allá de la merienda e invita a probar también las múltiples creaciones de sus desayunos y comidas. Propuestas donde deleitarse con una gran variedad de tostadas -con las de aguacate producto estrella-, smoothies naturales, ensaladas y, por supuesto, sin renunciar al clásico desayuno mediterráneo preparado con productos de máxima calidad.
La Molienda, cafetería moderna de especialidad
La cafetería más moderna de Palma elabora sus cafés con una materia prima que destaca en la ciudad por ser de las de más calidad. Un establecimiento reconocido por sus sabrosos cafés con leche, sus delicados cappuccinos y su famoso sándwich de huevo y aguacate. Cafés gourmet de origen y desayunos con productos ecológicos de proximidad en un luminoso y acogedor local. En enero abrirán su segundo local en la calle Archiduque Luis Salvador con obrador propio, donde harán tanto el pan como la repostería. Además, se han convertido en artesanos tostadores de café con tostador en el mismo local a la vista de los clientes.
Lluis Perez Pastisser y la repostería elegante
Este elegante y moderno café francés brinda un ambiente exclusivo en un lugar donde las creaciones de su maestro lucen como joyas en sus vitrinas. Estos diamantes -pastas, pasteles y repostería elaborados artesanalmente- se sirven con exquisitos cafés y tés para todos los gustos. El croissant de frambuesa es la protagonista estelar de Lluis Perez.
Rosevelvet Bakery, artesanos y auténticos
Se trata de una cafetería que se halla resguardada, como si estuviera ligeramente escondida, detrás de la concurrida Rambla palmesana. Su ambiente es moderno y sencillo y sirve cafés y pasteles deliciosos. Lo ideal es sentarse a mirar cómo preparan la repostería, saboreando alguna delicia recién salida del horno y dejándose invadir por su tentador y apetecible aroma. En los meses más cálidos, cuenta con una encantadora terraza donde se puede tomar plácidamente el sol.
Y, para los amantes del sofing, la esencia del café en grano para llevar en Cafés Llofriu
Y, para los que deciden tomarse un café en casa envueltos en una manta en el sofá, es una tienda dedicada a la venta de todo tipo de café en grano, una venta poco habitual hoy en día. Fue fundado en 1866 por la familia Llofriu como tostadora manual de café. El interior conserva un mobiliario característico de la venta al por mayor de los años ’60, con cajas de madera donde se guardan los distintos tipos de café.
Información y foto cortesia de nuestros amigos: Miriam Pagador y Enric Tomas
