Las tradicionales tejas de almendra son unas galletas crujientes que hacen «crunch» a cada mordida. Tienen una característica forma acanalada, de allí el nombre de «tejas». Hacer tejas de almendra crujientes es muy fácil, es una receta con ingredientes sencillos que solemos tener en casa o que no nos costará nada conseguir, se hacen en un ratito y son realmente deliciosas.
INGREDIENTES
- 100 g. de almendra molida.
- 50 g. de almendra cruda y entera.
- 75 g. de azúcar.
- 2 claras de huevo.
- 30 g. de harina.
- Ralladura de limón o vainilla.
MODO DE HACERLO
Las claras se baten a punto de nieve añadiendo despacio el azúcar, sin dejar de batir y cuando estén bastante duras se añade con suavidad la almendra molida, mezclada con la harina y el aroma de vainilla o ralladura de limón. Se incorpora 50 g. de almendra fileteada y sobre bandejas de horno untadas con mantequilla se ponen porciones de esta masa, del tamaño de nueces pequeñas.
Se extienden con los dedos mojados en agua fría dándoles forma redonda, muy separadas unas de otras. Se meten a horno, a 200º ó a 175º, hasta que estén doradas y conforme vayan estando hechas se sacan, ayudándose de espátula de acero. Inmediatamente se moldean en forma de tejas.
Cuando estén frías, se sirven sobre servilleta.