Las croquetas son uno de los aperitivos favoritos de millones de personas en todo el mundo.
Son fáciles de preparar y se pueden congelar para cuando las necesites y freírlas directamente sin necesidad de descongelarlas.
Existen muchas variantes, pero las más populares son las de jamón, de pollo y bacalao.
Las opciones son amplias, pero no la forma de prepararlas, ya que seguirá siendo la misma pero con diferentes ingredientes.
La clave es hacer una buena bechamel, la base de todo.
La receta de Chicote
Alberto Chicote suele preparar platos sencillos, tradicionales y ricos, de esos que podríamos comer cualquier día en casa.
Chicote generalmente le gusta compartir con todos sus trucos en sus redes sociales, explicando paso a paso la receta, para que podamos cocinar en casa como un auténtico chef.
Recientemente nos dice el mejor truco para preparar unas deliciosas croquetas de jamón.
Ingredientes
- 1 litro de leche
- 200 gramos de nata para cocinar
- 2 huesos de jamón
- 150 gramos de jamón (mejor de calidad, ibérico por ejemplo)
- 100 gramos de mantequilla
- 40 ml de aceite de oliva virgen extra
- 200 gramos de cebolla
- 90 gramos de harina
- Sal, pimienta y nuez moscada
- Huevo
- Pan rallado
Preparación
En una olla con tapa ponemos la leche y la nata junto con los huesos de jamón. Tapamos y dejamos que cueza durante 20 minutos.
Mientras tanto picamos la cebolla y el jamón, todo finamente.
En una cazuela grande ponemos la mantequilla el aceite de oliva y la cebolla, y dejamos que se cocine a fuego bajo durante 10 minutos aproximadamente.
Pasado ese tiempo, agregamos el jamón y lo dejamos durante unos 5 minutos para que suelte su grasa natural.
Luego, agregamos los 90 g de harina dejamos que se haga durante cinco minutos, moviendo de vez en cuando para que no se pase el tueste.
Hay que añadir la leche (que habrá tomado el sabor de los huesos de jamón) poco a poco, removiendo bien para que no queden grumos.
Chicote insiste en que no debemos añadir más leche hasta que la mezcla no esté bien mezclada. Cuando hayamos incorporado toda la leche la dejaremos hervir a fuego muy lento durante 10 minutos. Al terminar sazonamos al gusto y ponemos un poco de nuez moscada y pimienta molida que terminará de darle ese toque particular de las croquetas.
Después hay que dejar que la masa se enfríe y coja consistencia para que esté más dura y se pueda trabajar bien. Podemos extenderla en una fuente o una bandeja para que se enfríe más rápido.
Para finalizar le damos forma a las croquetas y las empanamos pasándolas por harina (sacudiendo bien el exceso), huevo batido y pan rallado.
Hay que freírlas en aceite muy caliente, a unos 180ºC, en sartén o freidora. Así conseguiremos que la parte de fuera quede muy crujiente y el interior permanezca suave. Cuando estén doradas, las colocamos sobre papel de cocina para retirar el exceso de aceite.