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Los chistes cortos suelen ser directos, incisivos, con sorpresa…
Lo corto si breve dos veces bueno.
Y una ventaja adicional es que, aunque no seas muy bueno contando chistes, estos son tan breves que te permiten disimular
- — ¿Cuánto cuesta alquilar un coche?
— Depende del tiempo.
— Vale, pongamos que llueve. - Un hombre entra en un restaurante y el camarero le pregunta:
— ¿Vino blanco el señor?
— No, ha sido al ver los precios.
- Un paciente entra en una consulta.
— ¿Qué es lo que le ha traído por aquí? —le pregunta el médico.
— Una ambulancia, ¿por qué?
- — ¿Cuánto cuesta alquilar un coche?
