(PD / Agencias).- Marta Ortega empezará como su padre, Amancio Ortega: vendiendo ropa y colocando escaparates. La hija menor del dueño del conglomerado textil Inditex -cadenas Zara, Massimo Dutti, Stradivarius…- iniciará en septiembre un proceso de formación meticulosamente programado para convertirla en la heredera que necesita un imperio formado por 3.215 tiendas repartidas por todo el mundo y que ha aupado al hombre afincado en Arteixo (La Coruña) a la lista de los diez más ricos del planeta.
La tercera hija de Amancio Ortega -tiene otra hija y un hijo, fruto del matrimonio anterior con Rosalía Mera- tendrá contacto también en otras etapas con los servicios jurídicos, fiscales y el departamento de comunicación y se da por seguro, también, que dedicará otras temporadas a trabajar en las oficinas de Inditex en París, Londres y Shanghai.
En una fecha sin prefijar, Marta Ortega se incorporará a la estructura corporativa de Inditex y, con el tiempo, sucederá a su padre en la presidencia. Como escribía ayer el periodista Luis Gómez, Marta Ortega, hasta ahora con una imagen pública plasmada en el «papel cuché» de la prensa rosa -sobre todo por una afición a la hípica por la que frecuentó Gijón y compitió en el hipódromo de Las Mestas-, ha cambiado al «papel salmón» de la prensa económica. Y, fiel al estilo de su padre, se ha apartado de los focos y no concede entrevistas.
