Swarovski Elements ha encargado a 22 de los nombres consagrados así como emergentes con más talento de la moda, un diseño especial del little black dress para la iniciativa 22 Ways To Say Black. El 20 de septiembre de 2010, en la prestigiosa galería Phillips de Pury & Company en Nueva York, bajo el patrocinio de Carla Bruni-Sarkozy, los vestidos serán subastados por Simon de Pury, y la recaudación se destinará a la American Cancer Society y a La Ligue nationale contre le cancer de Francia.
A menudo, el negro ha sido caracterizado como color «básico», pero en el mundo de la moda, el famoso «vestido negro» es todo lo contrario. Es un punto de partida de la alta costura moderna y en tiempos pasados, en el «vestido negro» es donde realmente brilló el talento creativo.
Con esto en mente, Swarovski Elements encargó a Giorgio Armani Privé, Givenchy por Riccardo Tisci, Lanvin por Alber Elbaz, Sonia Rykiel, Vivienne Westwood, entre otros diseñadores, que exploraran las posibilidades estéticas de los cristales tallados con precisión y el icónico vestido negro. Estas originales creaciones, todas adornadas con Swarovski Elements serán subastadas en beneficio de la American Cancer Society y La ligue national contre le cancer, dos asociaciones líder en este campo.
Durante la New York Fashion Week, del 07 al 20 de septiembre, los visitantes del New York Meatpacking District de Phillips de Pury & Company podrán ver estas piezas únicas que estarán expuestas antes de la subasta en la noche del 20 de septiembre. Después de la subasta se celebrará un exclusivo cóctel organizado por Nadja Swarovski, Vicepresidente de Comunicación Internacional.
El cien por cien de los ingresos de la subasta y de su catálogo, 22 Ways to Say Black, se destinarán a las organizaciones benéficas designadas. Publicado por Éditions Dilecta, la casa editorial de arte con sede en París, el catálogo está disponible en Amazon.com y en puntos de venta selectos en los Estados Unidos y el extranjero. Para obtener una lista completa de los puntos de distribución en los Estados Unidos y el extranjero, por favor visite www.swarovski-elements.com/black.
En 1895, Daniel Swarovski I, un vanguardista visionario de Bohemia, se trasladó a la localidad de Wattens, en el Tirol austriaco, con una máquina recién inventada para el tallado y pulido de los cristales para bisutería.
Desde sus comienzos que revolucionaron el mundo de la moda, Swarovski ha crecido hasta convertirse en el productor líder mundial de cristal tallado para moda, bisutería y, más recientemente, iluminación, arquitectura e interiorismo.
En la actualidad, el grupo, todavía propiedad de la familia y dirigido por la cuarta y quinta generación, alcanza un ámbito mundial, con cerca de 24.800 empleados y presencia en más de 120 países, con un volumen de negocio de 2.250 millones de euros en 2009. Swarovski consta de dos áreas de negocio principales, una dedicada a la producción y venta de elementos de cristal al sector industrial y la otra a la creación de productos acabados de diseño.
Los cristales de Swarovski se han convertido en un ingrediente esencial del diseño internacional. Desde 1965 la compañía también ha sido proveedora del sector de la joyería con piedras preciosas auténticas y sintéticas talladas con la mayor precisión. Para mostrar la creatividad subyacente en el corazón de la compañía, las líneas propias de accesorios, bisutería y piezas para la decoración del hogar de Swarovski se venden a través de más de 1.800 tiendas en todas las principales capitales de la moda. Swarovski Crystal Society tiene cerca de 350.000 socios en todo el mundo, coleccionistas entusiastas de las famosas figuras de cristal. Y en Wattens, Swarovski Kristallwelten, el museo multimedia del cristal, fue inaugurado en 1995 como una celebración del universo de innovación e inspiración de Swarovski.
El grupo Swarovski cuenta asimismo con Tyrolit®, que fabrica herramientas de pulido, Swareflex, con reflectores para la seguridad vial y Swarovski Optik, que produce instrumentos ópticos de precisión.
