Bárbara Rey no pasaba por su mejor momento tras la operación urgente de pecho a la que tuvo que someterse en abril y el posterior fallecimiento de su madre. Sin embargo, ahora recupera la sonrisa y el ánimo acompañada de las personas más importantes de su vida: su hija Sofía y su novio Simón.
La ex vedette acudía este miércoles a la reinauguración del restaurante de su novio en Marbella en la que era su primera aparición pública tras la muerte de su madre. Pero en una noche tan especial, Bárbara evitó hablar de su madre, a la que dice llevar siempre muy presente, igual que a su padre.
«Esta noche prefiero no recordar ese momento que para mi ha sido muy triste. Ella está presente igual que mi padre», comentó Bárbara. «Ellos estarán a gusto viendo que nosotros lo estamos aquí y felices. Por lo tanto espero que donde estén nos protejan», añadió.
Bárbara estuvo en todo momento acompañada por su hija Sofía Cristo, que aprovechó para pronunciarse sobre los ‘calificativos’ que Jorge Javier Vázquez llamó a Aída Nízar en directo. «Yo estoy de acuerdo con lo que dijo Jorge, pero no hay que llevarlo de forma literal. No tengo nada en contra de la madre de Aída», puntualizó Sofía.
CARMEN LOMANA, MUY BIEN ACOMPAÑADA
Pero Bárbara Rey no sólo estuvo rodeada de los más cercanos. También acudieron amigas como Carmen Lomana, que no dudó en participar de la vida social marbellí durante sus vacaciones en la localidad malagueña.
La ex concursante de ‘MQB’, se presentó acompañada de un atractivo señor entradito en años, muy del estilo de su ex novio Eduardo. Sin embargo, Lomana no quiso hablar sobre la identidad ni sobre la relación que la une a su acompañante.
Tras el desengaño amoroso que Carmen se llevó con Eduardo, puede que haya vuelto a confiar en las relaciones y dándole una oportunidad a los amores de verano…
