El dinero va donde está el dinero. La justicia ha dado la razón a Kim Kardashian. Fue el paso mes de febrero cuando la estrella de reality interpuso una demanda judicial contra la firma estadounidense Missguided, el motivo era el uso de su imagen para promocionar sus propios productos sin consentimiento previo. Además, la empresaria aludió que la compañía estaba vendiendo «copias» de prendas de la firma de su marido Kanye West, Yeezy, a precios más bajos. Finalmente, tras varios meses de espera, se ha podido saber que la celebrity ha ganado la batalla, según recoge la autora original de este artículo Sara Ullate en harpersbazaar y comparte Manuel Trujillo para Periodista Digital.
Según ha informado TMZ, la marca de ropa deberá pagar 2,8 millones de dólares a Kim Kardashian por daños y prejuicios. Por su fuera poco, Missguided también tendrá totalmente prohibido el uso de su nombre en beneficio propio, cabe recordar que desde la compañía mencionaban y etiquetaban a la empresaria en sus publicaciones para conseguir mayor repercusión de ventas y publicidad.
En esta ocasión, y dada la gravedad del asunto, la más popular del clan Kardashian ha querido llevar el caso hasta el final y recurrir a la justicia pero no se trata de algo puntual. En los últimos años han sido numerosas las quejas públicas por parte de la celebrity acerca de este tipo de tácticas por parte de firmas o páginas webs donde el mal uso de su propia imagen y de los diseños que ella había lucido le acababan perjudicando.
Pese a las buenas noticias, Kim todavía no se ha pronunciado. Estaremos atentas a sus redes sociales aunque quizás la empresaria quiera optar por dejar de lado el asunto y simplemente seguir con su vida normal.