El sindicato británico de pilotos pidió hoy al Gobierno que les consulte sobre la reapertura del espacio aéreo del Reino Unido, cerrado desde el jueves por la nube de ceniza volcánica procedente de un volcán islandés, y exigió un plan de rescate para el sector, como el que ayudó a reflotar la banca.
En un comunicado, la Asociación Británica de Pilotos de Aerolíneas (BALPA) manifestó que respeta la decisión del Centro de Control del Tráfico Aéreo (NATS) de imponer restricciones, pero instó a las autoridades a que consulten con los responsables de otros países que tienen más experiencia en circunstancias similares.
«Esta no es la primera erupción volcánica que ha habido en el mundo, pero es la primera vez que se cierra una espacio aéreo tan extenso durante tanto tiempo, sin que se vea el final», manifestó.
El sindicato que representa a los pilotos se preguntó «si el NATS y la Oficina Meteorológica han contrastado sus conclusiones con la de sus colegas en otras partes del mundo, muchas de las cuales tienen una mayor experiencia práctica en tratar con nubes de ceniza causadas por erupciones volcánicas».
«También queremos saber qué criterio se empleará para decidir que vuelve a ser seguro abrir el espacio aéreo. ¿Seguirá basándose en modelos informáticos, se tomará en cuenta la experiencia práctica, qué nuevas evaluaciones necesitan quienes toman las decisiones?», se preguntaron los pilotos en su comunicado.
El secretario general de BALPA, Jim McAuslan, consideró que «éstas son preguntas importantes» y que dado que «los pilotos tienen la responsabilidad en última instancia» en lo que se refiere a la seguridad de los pasajeros, «queremos saber en función de qué argumentos se tomará la decisión de reabrir el espacio aéreo».
«Para llegar a ese punto, tenemos la voluntad de ayudar a analizar la información actual, identificar posibles pasillos de vuelo y ofrecer la opinión de los aviadores. Podemos aportar experiencia; sólo hace falta que nos pregunten», aseguró.
McAuslan consideró que se corre el peligro de que la paralización del sector «se nos vaya de las manos» y alertó asimismo de la grave repercusión que este parón tiene en una industria, que ya se vio muy afectada por el impacto de la recesión económica mundial.
«El impacto financiero a corto plazo no podía ser más grave para una industria que ya arrastraba los efectos de la crisis. Varias compañías están viendo la bancarrota de cerca», alertó.
«El Gobierno tiene que dar un paso adelante y tener el mismo enfoque que cuando mantuvo a flote los bancos. Si no lo hace, se encontrará con que un sector igualmente importante de la economía se ha echado a perder», añadió el representante de los pilotos.
