El arzobispo Braulio Rodríguez presidirá por primera vez la procesión del Corpus Christi de Toledo que será solo en jueves después de casi veinte años y que se convertirá en el primer acto religioso solemne con participación castrense tras la aprobación del nuevo reglamento de Honores Militares.
La aprobación de esta nueva normativa del Ministerio de Defensa, el pasado 20 de mayo, ha ocasionado cierta polémica entre los sectores más tradicionales y conservadores de la ciudad por las limitaciones a los militares en los actos religiosos.
Pero, finalmente, el presidente regional, José María Barreda, que encabeza a las autoridades civiles en la solemne procesión, ha anunciado que ha hablado con la ministra de Defensa, Carmen Chacón, quien ha autorizado que los cadetes de la Academia de Infantería rindan honores al Santísimo, a la Custodia de Arfe, una auténtica joya de orfebrería gótica de dos metros y medio de altura.
Barreda ha dicho que la ministra se ha comprometido a que «los cadetes vayan con su uniforme de gala, con el sable correspondiente, que es lo que se hace en estos casos importantes, y que presenten armas al Santísimo» (la custodia del orfebre Enrique de Arfe).
La disposición adicional cuarta del mencionado reglamento recoge que «cuando se autoricen comisiones, escoltas o piquetes para asistir a celebraciones de carácter religioso con tradicional participación castrense, se respetará el ejercicio del derecho a la libertad religiosa y, en consecuencia, la asistencia y participación en los actos tendrá carácter voluntario.
Preguntado por la nueva normativa militar, el arzobispo ha dicho antes de conocerse la autorización de la ministra que «el Corpus no es el himno nacional» y que «las leyes están ahí, hay que cumplirlas, pero se puede discrepar de ellas».
La decisión del nuevo arzobispo de celebrar solamente una procesión en jueves (durante seis años ha habido dos procesiones, una en jueves y otra en domingo) después de que en 1991 la Conferencia Episcopal decidió trasladar la festividad al domingo para adaptar el calendario litúrgico al laboral, ha sido muy bien recibida en la ciudad, hasta el punto de que la Junta Pro Corpus de Toledo le ha concedido la ‘tarasca de honor’.
Tras la misa solemne en la catedral primada, que será en rito hispano mozárabe, saldrá el cortejo procesional, presidido por Braulio Rodríguez, que desfilará tras la custodia.
Por parte del Gobierno regional, además de Barreda, desfilarán la vicepresidenta María Luisa Araújo y el consejero de Ordenación del Territorio e Industria, Julián Sánchez Pingarrón, a los que seguirán el resto de autoridades y cofradías y hermandades.
