La secretaria de Estado de Transportes, Concepción Gutiérrez, asegura que �no se dejará a la gente sin opción de transporte�, ya que �donde el tren no sea eficiente habrá sistemas combinados de transporte�, es decir, se llevará a cabo un plan de reordenación para buscar el medio más eficiente.
En una entrevista concedida a Servimedia, Gutiérrez respondió así a la inquietud suscitada en diversos lugares de la geografía española al conocerse que Renfe puede dejar de ofrecer algunas rutas no rentables si éstas no reciben la consideración de servicio público.
Según explicó Gutiérrez, en la actualidad el ferrocarril está presente en algunos lugares donde hay otros modos de transporte que son más eficientes, como el autobús. De hecho, denunció que en algunos casos en el tren �hay mucha ineficiencia�.
A este respecto, indicó que cada modo de transporte tiene un ámbito donde es el más rentable socialmente. Detalló que a más de 1.000 kilómetros la mejor opción es el avión, que entre 300 y 800 es el tren de alta velocidad y que por debajo de esta distancia en muchas ocasiones el más eficiente es el autobús.
En relación al cambio normativo iniciado por el Ejecutivo, señaló que el Gobierno dejará de subvencionar de forma global a Renfe sufragando su déficit tal y como hace ahora y empezará a dar ayudas concretas para que se mantengan ciertos servicios, lo que recibe la consideración de obligaciones de servicio público.
Para definir estos servicios, el Gobierno se ha dado de plazo hasta el 30 de noviembre, por lo que antes de esa fecha debe elaborar la lista de los que continuarán siendo subvencionados.
En principio, seguirán siendo subvencionados los servicios de cercanías y aquellos trenes de media distancia que tienen pasajeros que viajan a diario entre dos puntos en distintas comunidades autónomas para acudir a su lugar de trabajo.
En este segundo caso, Gutiérrez advirtió de que solo se subvencionarán las tarjetas multiviaje, ya que �el que viene de Japón a ver Toledo no tiene por qué pagar solo cinco euros�.
También podrán ser subvencionados por las comunidades autónomas servicios que no sean de cercanías y que discurran en sus territorios y que consideren importantes.
Se trata, concluyó Gutiérrez, �de que Renfe se ponga las pilas y compita en condiciones de mercado� en los servicios no subvencionados, ya que para estos Bruselas no admite ayudas de Estado que atentan contra la competencia.