Con todas las escotillas abiertas para intentar sobreponerse a los malos olores que también comenzaba a desprender la comida podrida
Había 60 españoles en el pasaje del trasatlántico «MSC Opera» que comenzó su idílica travesía por el Báltico el pasado 7 de mayo de 2011.
Pero el viernes 13 (no apto para supersticiosos) algo comenzó a ir mal. Un fallo en el panel eléctrico y ¡zas! sin luz, ni comunicaciones, ni servicio de mantenimiento… El crucero al traste.
Así arranca E.M. en ABC su reportaje, donde recoge lo que le cuentan varios amigos y familiares de algunos de esos 60 pasajeros, como Raquel o Javier, que han pasado un fin de semana de pesadilla hasta arribar esta mañana al puerto sueco de Nynäshamn.
Mutismo casi absoluto por parte de la naviera MSC Cruceros, que fletaba el gigante con 1.800 pasajeros y 200 miembros de la tripulación a bordo.
ABC se ha puesto en contacto con la compañía, que ha remitido a un comunicado donde se evidencia que se ha organizado el regreso a tierra firme de los 60 pasajeros.
En el entorno familiar de estos, sin embargo, repiten una frase:
«Ha habido una malísima gestión por parte de la compañía naviera a la hora de resolver con celeridad el problema».
