Conforme se acercan las fechas de las vacaciones, no son pocos los hogares que se plantean la duda de qué hacer con sus mascotas. No hay que olvidar que el perro o el gato son miembros de la familia de pleno derecho, y se les debe tratar como tal.
Cuando viajar con la mascota es una opción
Muchas veces surge la duda de qué hacer con el animal mientras la familia se marcha de viaje. Sin embargo, muchas veces no se tiene en cuenta que en la mayoría de los casos es posible viajar con la mascota, especialmente, si se trata de un perro. Actualmente, existen cada vez más playas que aceptan perros, por lo que cada vez es más sencillo organizar las vacaciones de verano con toda la familia. Cabe destacar, que para éstos animales, la compañía es muy importante y no es nada recomendable dejarlo solo aunque sea un viaje de fin de semana.
A la hora de emprender un viaje debemos tener la precaución de llevar nuestras mascotas en un transportín amplio, con suficiente comida y bebida. Asimismo, si el viaje va a ser en coche, es recomendable parar cada dos horas, sacarlo para que se airee y, por supuesto, no dejar a las mascotas en el interior.
Podemos encontrar muchos hoteles y apartamentos que permiten mascotas aunque no todos los transportes públicos aceptan a nuestros queridos ánimales de compañía. Asimismo, otro factor a tener en cuenta al planear nuestras vacaciones al extranjero con nuestras mascotas es la legislación vigente en cada país. En este sentido, en la página de MedicAnimal.es hay una sección específica para viajar con mascotas, en la que señalan que: «no es lo mismo los viajes dentro de la UE, que los viajes no pertenecientes a la UE, al igual que también hay que planear el regreso a la UE». Por esta razón, recomiendan informarnos en en nuestro veterinario más cercano para saber tomar las precauciones necesarias.
Dejar a la mascota en tierra
Está claro que esta opción de viajar con la mascota no siempre es posible. Por ejemplo, si se trata de un gato y el viaje es corto, es mejor no llevarlo porque son animales que tardan tiempo en adaptarse al entorno, y les supondrá mucho estrés. En estos casos, la mejor opción es dejarlo con comida y agua limpia en casa, y encargar a un amigo o familiar que se pase cada día o cada dos vigilar el estado del animal y a pasar algo de tiempo con él.
Otra opción, sobre todo si se trata de un animal más social, es llevarlo a casa de una persona de confianza que se pueda encargar de él. Para estos casos, quizás sea útil dejarle a la persona encargada de nuestra mascota una copia de este libro, en el cual podrá encontrar toda la información necesaria en caso de emergencia con nuestro animal de compañía. Tampoco debes olvidar tener en cuenta ciertos aspectos tales como: que la mascota vaya a estar cómodo en la casa, que se vayan a ocupar de él y, que si tienen otros animales en el hogar, éstos deben ser compatibles y deben estar esterilizados, para ahorrar problemas.
La tercera opción: darle sus propias vacaciones
Si se disponen de medios suficientes, llevar a la mascota a un hotel para animales es una opción por la que cada vez opta más gente. No hace falta seguir el ejemplo de los perros de Paris Hilton, que se alojan en hoteles de cinco estrellas con Spa, televisión por cable y servicio de habitaciones: muchas residencias consisten simplemente en habitaciones con parte cerrada y parte al aire libre dónde los animales están atendidos y bien cuidados. La mayor parte de grandes ciudades cuentan ya con oferta variada de hoteles para mascotas, y algunas clínicas veterinarias también ofrecen sus propios servicios de guardería. De esta manera, toda la familia disfruta de sus vacaciones sin preocupaciones.
