El túnel de 7,3 kilómetros que permitirá que los trenes de alta velocidad atraviesen Madrid entrará en servicio durante los primeros meses de 2016, lo que permitirá que todas las líneas ferroviarias confluyan en la estación de Chamartín, con lo que Renfe podrá comercializar trayectos que unan el norte de la península con Cataluña, la Comunidad Valenciana y Andalucía.
Fuentes del gestor ferroviario explicaron a Servimedia que la puesta en marcha de esta infraestructura, cuya construcción estaba casi concluida en 2011 cuando se produjo el cale del túnel, está pendiente de la finalización de las obras de cuadruplicación de las vías del AVE entre Atocha y Torrejón de Velasco, algo indispensable para que este tramo pueda absorber todo el tráfico ferroviario previsto en los próximos años.
Con la puesta en marcha del túnel, las líneas de alta velocidad que actualmente terminan en Atocha podrán mantener su destino en esa estación o atravesar la capital, con lo que se podrán unir a las del norte, que finalizan su recorrido en Chamartín.
Por su parte, las líneas del norte, las que concluyen en la cornisa cantábrica y Galicia, podrán proseguir su recorrido hasta el sur y el este peninsular, aunque sin hacer parada en Atocha, ya que ambas estaciones madrileñas no estarán conectadas.
Aunque de momento solo hay una línea AVE que discurre por esta zona, la que une Madrid con León a través de Segovia, Valladolid y Palencia, está prevista la inauguración en los próximos meses de nuevos tramos a Zamora, Salamanca y Burgos. Además, según las previsiones del Ministerio de Fomento, en 2018 debe estar concluida la línea hasta Galicia y en 2019 la ?Y vasca?.
HUB ferroaeroportuario
Este túnel de alta velocidad es un elemento fundamental para que Chamartín pueda convertirse durante la próxima legislatura en un ‘hub’ ferroaeroportuario, ya que todas las líneas AVE podrán llegar a esa estación, que ofrecerá enlaces directos al aeropuerto de Barajas.
La idea es que los pasajeros que lleguen en trenes de alta velocidad o de larga distancia a esta estación situada al norte de Madrid puedan también facturar su equipaje en las dependencias ferroviarias, para que no deban cargar con sus maletas en el trayecto hasta el aeropuerto.
De esta manera, Adif descarta por el momento la construcción de una línea de alta velocidad hasta el aeropuerto madrileño ofreciendo una alternativa con un coste económico muy inferior.
En el caso de los pasajeros de alta velocidad que concluyen su recorrido en Atocha, Adif acaba de concluir las obras que permiten un enlace rápido entre la terminal de llegada de los AVE y los andenes de Cercanías a través de un ascensor y una pasarela.
Más de 500 millones de euros
La construcción del túnel, que discurre por debajo de ocho líneas de Metro y de dos túneles de Cercanías, ha supuesto una inversión de 206 millones de euros, mientras que la construcción de la nueva vía entre la estación de Atocha y Torrejón de Velasco, de 34,2 kilómetros, cuenta con un presupuesto global de algo más de 302 millones.
Además, el montaje de vía de ambos tramos ha sido adjudicado por 4,7 millones, a los que hay que sumar el valor de los materiales aportados por Adif Alta Velocidad para su ejecución, que se eleva a 21,2 millones.
Por otro lado, se destinarán otros 34,8 millones a la redacción de los proyectos constructivos y la ejecución de las obras de instalaciones de enclavamientos, sistemas de protección de tren, control de tráfico centralizado, sistemas auxiliares de detección, telecomunicaciones fijas y sistemas de protección y seguridad.
También se ha adjudicado el contrato para la implantación de las instalaciones de electrificación (catenaria y sistemas asociados) desde Chamartín hasta Torrejón de Velasco, así como su mantenimiento durante 24 meses, por importe de 10,8 millones, y se encuentra en licitación la construcción de protecciones acústicas entre Chamartín y Torrejón de Velasco por importe de 9,6 millones.
