El establecimiento The Shed at Dulwitch llegó a ser valorado como el mejor restaurante de Londres (Reino Unido) en el sitio web de recomendaciones para los viajeros TripAdvisor, pero nunca existió.
La historia de esta taberna ficticia comenzó el pasado 5 de mayo, cuando el periodista Oobah Butler -que durante un periodo se ganaba la vida escribiendo reseñas falsas- registró su existencia para comprobar si era posible hacer eso «en el clima actual de desinformación», según recoge RT.
Primero, tomó varias fotos de su cobertizo, creó una página web y compró un móvil desechable. Después, simuló la comida con crema de afeitar, esponjas de baño, accesorios para inodoros y hasta su propio pie.
The Shed at Dulwich: Writer, @Oobahs, scammed @TripAdvisor into believing his backyard shed was #London’s top restaurant.. then he opened the doors for one night only, and served customers @IcelandFoods ready-meals! ? Read more: https://t.co/eUXi8SHtFl pic.twitter.com/3vyHtHZH1c
— علي الصباغ (@Ali_Alsabbagh) December 7, 2017
Reseñas ficticias
En un principio, era el local número 18.149 de la capital británica. Para asegurar su ascenso rápido, tanto Butler como sus amigos y otros desconocidos publicaron reseñas que se veían creíbles mediante distintos métodos con vistas a que TripAdivisor no considerara que era ‘spam’.
Ya con cierta fama de establecimiento exclusivo, el ideólogo de este plan recibió cada vez más llamadas y correos electrónicos de personas que anhelaban visitar The Shed at Dulwitch, incluso con meses de antelación, aunque siempre empleó excusas elaboradas para rechazar a los clientes.
Cuatro meses después y ya en el puesto 156, varias empresas se pusieron en contacto para negociar una posible cooperación o mandar muestras gratis de sus productos.
Inauguración
En noviembre, ya encabezaba la lista y eso incrementó el número de pedidos, sobre todo por parte de personas que visitaban Londres por primera vez. En ese momento, TripAdvisor quiso obtener más información.
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Al final, Oobah Butler inauguró el restaurante y aceptó varias reservas. Sus amigos le ayudaron a limpiar un poco el cobertizo y vendió comida precocinada y vino barato. Para que tuvieran la ilusión de encontrarse en un restaurante lujoso, les hizo creer que podían escoger una de las gallinas que correteaban el lugar para que se la cocinaran.
Ese día fue el primer y el último día que funcionó… aunque algunos clientes se quedaron con ganas de repetir la experiencia. Finalmente, este farsante contó toda la verdad a TripAdvisor y preguntó cómo fue posible que llegara tan lejos.
La respuesta de esa empresa fue que resulta extraño que haya restaurantes falsos, que suelen ser creación de personas que también desean poner a prueba sus algoritmos de seguridad.
Desde entonces, The Shed at Dulwitch desapareció de la página de recomendaciones.
