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Qué ver en Menorca

Qué ver en Menorca
Taulade Torrellisar Menorca talayótica

La Menorca Talayótica está integrada por monumentos prehistóricos de gran autenticidad que tienen un valor excepcional. La técnica constructiva con que están realizados, el buen estado de conservación e integridad que presentan a pesar de que tienen más de 4.000 años de historia y la abundancia en que se encuentran (en sólo 700 km2 de superficie hay más de mil 500 yacimientos) convierten al patrimonio talayótico menorquín en uno de los más originales de toda la región mediterránea.

Bajo el lema «Nuestro patrimonio: donde el pasado se encuentra con el futuro», más de 20 recintos han sido seleccionados para presentar la Arquitectura Talayótica como candidata a ser reconocida Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por la promoción de la investigación sobre los restos arqueológicos y aumentar el valor patrimonial.

Los monumentos elegidos destacan por ser los que mejor sintetizan la prehistoria insular, por la cronología, tipología, funcionalidad y por la significación que tienen. Una candidatura que este año cobra especial relevancia, ya que este 2018 se celebra el Año Europeo del Patrimonio Cultural.

Obtener este reconocimiento pondría en valor una cultura que cuenta con más de 4.000 años de historia y una gran densidad de recintos arqueológicos y megalíticos, repartidos por toda la isla formando uno de los reclamos turísticos más importantes de las Islas Baleares.

Los yacimientos talayóticos de Menorca

Las construcciones de la Cultura Talayótica destacan por los numerosos e importantes monumentos que dan cuenta de las huellas de la Prehistoria en Menorca. A lo largo y ancho de la isla, pueden encontrarse multitud de sepulcros megalíticos, hipogeos, cuevas, naviformes, pozos, talayots, recintos cubiertos y, sobre todo, destacan las navetas funerarias y taulas, ya que son únicas y exclusivas de Menorca, sin igual a nivel mundial.

Situados en magníficos parajes naturales, destacan recintos talayóticos como las navetas (Naveta d’Es Tudons y Naveta nord de Rafal Rubí), talayots (como el de Torrelló), Taulas (como las de Torrellisar y la de Talatí de Dalt), necrópolis (como la de Cala Morell) o poblados (como los de Torrellafuda y Torre d’en Galmés).

El mayor poblado talayótico de la isla: La Torre d’en Galmés

Gracias a su ubicación, desde donde se puede ver gran parte de la costa sur de la isla gracias a los tres talayotes con los que cuenta, se cree que la Torre d’en Galmés ejercía una supremacía estratégica sobre otros poblados de Menorca. Además, está considerado como uno de los yacimientos arqueológicos más grandes de las Islas Baleares.

Cronológicamente, data de la época pre-talayótica (antes del 1.100 a.C.), hasta la época romana tardía, aunque también se han hallado restos de época islámica (siglo XII d. C). Se calcula que durante su máximo esplendor (entre el año 1.100 a.C. y la conquista romana), pudieron vivir en él unas 900 personas.

Este poblado talayótico menorquín es un conjunto arqueológico de justificado valor universal excepcional por su técnica, autenticidad, exclusividad, originalidad y singularidad y por el hecho de ser testigo único de una sociedad prehistórica mediterránea insular.

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Autor

Paul Monzón

Redactor de viajes de Periodista Digital desde sus orígenes. Actual editor del suplemento Travellers.

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